Enormes diferencias entre los anuncios reportados y los monitoreados por el instituto
Cuenta regresiva para que partidos aclaren al IFE gastos de campaña
El plazo para que los partidos aclaren sus gastos en las campañas políticas realizadas en 2006 ha comenzado a correr, y tendrán hasta el 17 de abril para convencer a la Comisión de Fiscalización del Instituto Federal Electoral (IFE) de que las cuentas que le remitieron el año pasado son correctas, a pesar de que persisten dudas sobre diversas partes de todos los informes.
A partir del 18 de abril la comisión se concentrará en la elaboración de los dictámenes de los cinco informes -tres de partidos políticos y dos de coaliciones- sobre las 365 campañas realizadas por cada uno de esos actores: la presidencial, las 64 de senadores y las 300 de diputados federales.
Hasta ahora, las más notorias diferencias -que abarcan la mayor parte del gasto- corresponden al gasto en promocionales en radio y televisión. Sin embargo, no es el único rubro en el que los partidos tienen que cuadrar las cuentas de sus erogaciones.
De acuerdo con la regulación vigente, los partidos y las coaliciones tuvieron la posibilidad de notificar al IFE la forma en que habrían de prorratear 50 por ciento de sus gastos entre sus diversas campañas -el resto se distribuiría a partes iguales entre la presidencial, las de senadores y las de diputados-, por lo que sus informes deben coincidir con lo que originalmente reportaron al instituto.
Una parte del esclarecimiento que ha solicitado el IFE corresponde precisamente a esa distribución de recursos entre las campañas federales que realizaron.
En procesos anteriores, la Comisión de Fiscalización detectó la existencia de continuos cambios en el prorrateo de gastos, para lograr ajustar las cuentas, evidenciando el descontrol del gasto.
Por ello, para el proceso electoral de 2006 se optó por que los partidos remitieran con anticipación la forma en que distribuirían los gastos, lo que ahora deben probar.
Sin embargo, lo que mayor tiempo consumirá en las próximas semanas será hacer coincidir el número de anuncios en radio y televisión reportados por los partidos con los del monitoreo del IFE y los de los informes remitidos por los concesionarios de medios electrónicos.
Por ahora, hay miles de mensajes -arriba de 200 mil- de diferencia entre el número informado por partidos y coaliciones con los contados por el instituto.
Un aspecto importante que ha complicado el asunto son las deudas que adquirieron los partidos, lo cual impide obtener las facturas necesarias para acreditar puntualmente cada uno de esos anuncios.
En el pasado, desde que se formalizó el proceso de fiscalización, las dos mayores sanciones que ha aplicado el IFE -mil millones de pesos al Revolucionario Institucional, por el caso Pemexgate, y 490 millones a la alianza panista-pevemista, por el caso de Amigos de Fox- se asocian a las campañas presidenciales.
El instituto debe concluir su fiscalización en mayo próximo.