Aprueba Senado de EU nuevos fondos para la guerra si se aplica un calendario de retiro
Más de cien muertos deja ola de atentados con coche bomba en Irak
Bagdad, 29 de marzo. Más de 100 personas murieron este jueves en Irak, 60 de ellas en un doble atentado suicida en un mercado en el noreste de Bagdad, el ataque más mortífero desde la implementación de un nuevo plan de seguridad en la capital iraquí, a mediados de febrero. Por otro lado, el presidente iraquí, Jalal Talabani, sostuvo que la intervención estadunidense en Irak se ha convertido en "una ocupación".
En Washington, el Senado estadunidense aprobó nuevos fondos para la guerra en Irak pero lo condicionó a un calendario para el retiro de sus tropas en ese país, en un duro enfrentamiento con el presidente George W. Bush, que amenaza con vetar esa ley.
Sin mencionar directamente a Estados Unidos, Talabani sostuvo que "transformar la liberación de Irak en una ocupación con las graves consecuencias que esto ha acarreado en el plano interno y los miedos y temores que ha suscitado en las escenas árabe, regional e internacional, es contrario a lo que las fuerzas nacionales y los partidos iraquíes proyectaban por aquel entonces", en 2003.
Por otro lado, al menos 60 personas murieron y 25 resultaron heridas en un triple atentado suicida perpetrado en un mercado del barrio capitalino chiíta de Shaab, según los servicios de seguridad.
Un primer coche bomba estalló cerca de un mercado, el segundo en las inmediaciones de un tribunal, y el tercero cerca de una base militar en construcción. Al menos nueve obuses de mortero fueron disparados poco después contra zonas residenciales.
En Khales, al menos 43 personas, entre las que figuraban numerosos niños y mujeres murieron en una serie de ataques perpetrados a la hora en que las personas suelen hacer sus compras, en vísperas del día de oración del viernes. Khales se ubica en la provincia de Diyal, habitada por sunitas y chiítas.
Otras 16 personas fallecieron en diversos hechos de violencia ocurridos este jueves en Irak.
En otro orden, la medida sancionada este jueves por el Senado estadunidense que busca forzar un drástico cambio en la política de Estados Unidos en Irak, fue aprobada por 51 votos contra 47. Esta decisión del Senado fija un enfrentamiento con Bush, que acusa a sus adversarios de sacrificar el interés nacional a la política partidaria.
Dentro de un mes, el proyecto de ley destinado a financiar las operaciones militares en Irak y Afganistán para 2007 podría teóricamente ser adoptado en su versión definitiva por las dos cámaras del Congreso, dominadas por los demócratas. La Cámara de Representantes adoptó la semana pasada una versión ligeramente diferente, y ahora los dos textos deben ser armonizados.
El texto del Senado asigna 122 mil millones de dólares principalmente para financiar las operaciones militares en Irak y Afganistán este año. La suma supera en unos 20 mil millones de dólares lo solicitado por el gobierno, e incluye una asignación en favor de los militares heridos en el campo de batalla y de regreso en el país, así como diversas subvenciones, entre ellas agrícolas.
En especial, los demócratas lograron por primera vez, gracias a la deserción de dos legisladores republicanos, que el Senado endosara el objetivo de un retiro del grueso de las tropas de combate para el 31 de marzo de 2008, lo cual concuerda con las recomendaciones que hizo en diciembre el Grupo de Estudios sobre Irak que co-presidió el ex secretario de Estado James Baker. Según el texto del Senado, el retiro de tropas debe comenzar dentro de cuatro meses.
Bush recordó, sin embargo, que rechazará cualquier imposición de un calendario para retirar las tropas de Irak. "Vetaré el proyecto si éste restringe a nuestros comandantes en Irak, no financia a nuestras tropas y tiene demasiados gastos accesorios", dijo tras una reunión con legisladores del Partido Republicano.