"Abiertas, las puertas" a proveedores de Estados Unidos: presidente de Alimport
Cuba prevé comprar este año en el exterior entre mil 600 y mil 700 mdd en alimentos
La Habana, 28 de marzo. Cuba tiene previsto comprar este año en el exterior entre mil 600 y mil 700 millones de dólares en alimentos y mantiene "las puertas abiertas" a proveedores de Estados Unidos, pese a las dificultades para ejecutar esas operaciones, dijo el presidente de la empresa importadora Alimport, Pedro Alvarez.
El funcionario firmó la noche del martes la compra de trigo a la empresa Louis Dreyfus y de carne de cerdo a Farmland, ambas con sede en el estado de Nebraska, por un total de 15.75 millones de dólares.
El gobernador de esa región central de Estados Unidos, Dave Heineman, quien realiza su tercer viaje a Cuba, subrayó su intención de "ampliar los suministros" alimentarios a la isla.
El rango de compras alimentarias citado por el presidente de Alimport es similar al del año pasado. Según informes oficiales, esa factura registró un salto de 35 por ciento entre 2004 y 2006.
Estados Unidos es el principal proveedor de Cuba en ese rubro y su sexto socio comercial, a pesar del bloqueo económico que Washington aplica contra la isla desde hace más de cuatro décadas.
En 2006, Cuba compró 560 millones de dólares en alimentos a compañías estadunidenses y desde que inició estas operaciones, en 2001, ha pagado más de 2 mil 260 millones de dólares, indicó Alvarez.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos reportó ventas a la isla caribeña en 2006 por 348 millones de dólares y un total de mil 521.8 millones de dólares en cinco años. La discrepancia se debe a que La Habana incluye en su cómputo los costos de flete y seguro.
En lo que va del año, las compras a los estadunidenses llegaron a 108 millones de dólares, dijo Alvarez, y anunció que en mayo habrá aquí una ronda de negociaciones para suministros del segundo semestre, pero declinó pronosticar el nivel de contratación para 2007: "Eso está por verse".
El margen de duda se debe a los obstáculos que impone la Oficina de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro a esas operaciones, que se realizan bajo una excepción legal al bloqueo.
Embarques de leche en polvo y otros alimentos han quedado paralizados en puertos cubanos, porque una traba burocrática impedía que los proveedores cobraran su pago ya depositado en Estados Unidos, señaló el presidente de Alimport, como ejemplo de las dificultades.
Las limitaciones generan inseguridad comercial, "impiden un crecimiento mayor de las compras y están poniendo en total desventaja" a los proveedores estadunidenses, dijo Alvarez, quien recordó que Alimport acude a otros suministradores como China, Vietnam, Argentina y Brasil.