Usted está aquí: viernes 16 de marzo de 2007 Mundo Dos diputadas destituidas sufren agresión en poblado ecuatoriano

Marcha pacífica en Quito en apoyo a la Constituyente

Dos diputadas destituidas sufren agresión en poblado ecuatoriano

DPA, REUTERS

Quito, 15 de marzo. Nuevos incidentes surgieron hoy en medio de la pugna política entre el Congreso unicamaral y el Tribunal Supremo Electoral (TSE), cuando unos dos mil manifestantes agredieron a dos diputadas destituidas que acudían a una audiencia judicial que estudia el caso.

Los incidentes ocurrieron en un poblado de Manabí, donde un juez local dejó en "suspenso" la destitución de los 57 congresistas por el tribunal electoral, un recurso con el que buscan anular tal resolución, que mantiene al país andino sumido en una aguda crisis política.

El violento acto se convirtió en un capítulo más del enfrentamiento que libran el presidente Rafael Correa y sus opositores, en torno a la realización el 15 de abril de una consulta popular para aprobar la instalación de una Asamblea Constituyente.

Las legisladoras afectadas en estos hechos son Gloria Gallardo y Silka Sánchez, cuyos vehículos resultaron dañados cuando unos 2 mil manifestantes les arrojaron piedras, y la policía tuvo que dispersar con gas lacrimógeno al grupo enardecido.

Los 57 diputados, destituidos la semana pasada por oponerse al plan político del mandatario, intentan anular su remoción por medio de un amparo constituyente que se tramita en un juzgado de Rocafuerte, de la provincia costera de Manabí. Un trámite que se vio interrumpido por estos actos de violencia.

El juez que lleva la causa podría pronunciarse en los próximos días. Una resolución favorable a los intereses de los legisladores dejaría sin efecto la resolución de la corte electoral, que ha advertido que podría remover al magistrado si echa abajo su pronunciamiento.

En tanto, este día hubo marchas pacíficas en Quito en apoyo a la Asamblea Constituyente con plenos poderes, la iniciativa del presidente Rafael Correa.

También se realizaron manifestaciones en Guayaquil; las calles fueron tomadas por unos 8 mil simpatizantes de Correa y aproximadamente 5 mil habitantes y empleados municipales movilizados por líderes del derechista Patido Social Cristiano, que se opone a la Constituyente. Ambas concentraciones transcurrieron en calma bajo la vigilancia de 900 policías.

El diputado Federico Pérez, uno de los legisladores de la derecha destituidos, presentó hoy su renuncia al cargo y prometió que no volverá a participar en política y criticó la actitud de opositores y gobiernistas en esta crisis.

 
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