Las recientes mesas de trabajo sólo generaron rechazo en todo el país, advierten
Priístas proponen a Paredes cambios al documento base de la cuarta Asamblea
Programa de acción, declaración de principios y estatutos, los rubros a modificarse
Luego del fracaso de las mesas de trabajo que se realizaron en todo el país, a partir de las cuales se elaboró un documento base que se discutiría en la cuarta Asamblea Nacional priísta, y que sólo consiguió consenso sobre el rechazo de diversos sectores y organizaciones al Partido Revolucionario Institucional (PRI), se plantearon diversas modificaciones para dar salida a los reclamos, mismos que se darán a conocer este lunes.
Los coordinadores del tricolor en el Senado, Manlio Fabio Beltrones Rivera, y en la Cámara de Diputados, Emilio Gamboa Patrón, así como las dirigencias de los sectores obrero, campesino, las organizaciones de mujeres y jóvenes, expusieron ante la presidenta nacional electa, Beatriz Paredes, una serie de propuestas que cambian en su totalidad el llamado documento base.
Los cambios se proponen para el programa de acción, la declaración de principios y los estatutos, a efecto de evitar una confrontación mayor entre los priístas, quienes sostienen que el primer texto es antidemocrático y pretende, entre otras cosas, eliminar conquistas de grupos y sectores.
Los cambios ''sugeridos'' por los coordinadores en el Congreso, además de líderes de sectores y organizaciones, amplían la burocracia partidista al permitir que la presidencia cree las comisiones que considere pertinentes, además de que faculta a los órganos de gobierno para modificar el programa de acción, es decir, podrían retirar los candados que hasta ahora han impedido que los priístas voten en favor de cambios como el IVA en alimentos y medicinas, o la apertura de petróleo o electricidad al capital extranjero.
Condena de mujeres jóvenes e indígenas
Luego de que mujeres, jóvenes e indígenas condenaran el llamado documento base, ayer se acordó fortalecer la equidad de género y el sector juvenil; además, se otorgan mayores atribuciones y capacidad normativa al Consejo Político Nacional, y la Comisión Política Permanente pasa de 120 a 190 integrantes.
Asimismo, se le dan facultades para crear tres comisiones de dictamen: la de gobierno, la de política económica y asuntos financieros, mientras que la Comisión de Imagen y Comunicación se convierte en secretaría.
Se sumarán jóvenes y mujeres a las comisiones temáticas. Se crean dos órganos, de fortalecimiento partidario y reconocimiento a la militancia y de transparencia. A la Comisión de Justicia Partidaria se le dan funciones de conciliación; se fortalece la Comisión de Procesos Internos, que junto con el Consejo Político Nacional pueden atraer los casos de los estados donde haya conflictos por candidaturas, entre otros, para, inclusive, reponer el procedimiento.
Los diferendos al interior del PRI en torno a la cuarta Asamblea Nacional, que prevé diversas reformas a los órganos del partido y a los propios documentos básicos, enfrentan a grupos y corrientes del tricolor que de una parte buscan imponer ''el inmovilismo para mantener privilegios'', y otros que demandan el compromiso de una apertura real del partido, que reconozca a las bases, los liderazgos naturales y la transformación a fondo del organismo político.
La respuesta, advierten, no está exclusivamente en reducir al mínimo la estructura burocrática, sino en eliminar la excesiva regulación, ya que lo hacen inoperante y le resta competitividad y capacidad de acción y decisión entre sus militantes.
De una parte, la Confederación Nacional de Organizaciones Populares, que encabeza Marco Antonio Bernal, señaló que es urgente establecer un cambio en su sistema normativo garantizando la gobernabilidad interna y el pleno cumplimiento de sus reglas.
Para la asamblea, propuso la inclusión de cuatro grandes temas en sus documentos básicos, que son: una nueva concepción federalista; garantizar los derechos políticos, sociales y económicos de la sociedad; redefinir el modelo de desarrollo que requiere el país, y la articulación de una nueva concepción de seguridad, como garantía de progreso.
En este sentido, los cenopistas advierten sobre la necesidad de simplificar la estructura del Partido Revolucionario Institucional, eliminando la burocracia interna, y profesionalizar a sus integrantes evitando así la llegada de arribistas o ''chambistas'' que llegan a posiciones estratégicas sólo por recomendación o por el influyentismo de la dirigencia en turno.
Exigieron la eliminación de los candados para ser candidatos a elección popular, ya que esta medida, aseguran, es anticuada y no responde a la integración de nuevos líderes de comunidades que sólo por no contar con un puesto de elección previa, no pueden aspirar a cargo alguno y ante dicha discriminación son cooptados por otros partidos.
Otro de los temas destacados es la exigencia de transparencia y rendición de cuentas, con medidas de mayor firmeza en todos los comités directivos estatales y municipales, así como del Comité Ejecutivo Nacional.