Ahmadinejad advierte que no pasará por la "humillación" de suspender su plan nuclear

EU acusa a Irán de suministrar armas a la resistencia iraquí

El contrabando de explosivos viene de "los más altos niveles" del gobierno iraní: Pentágono

Festejos en Teherán y otras partes del país por el 28 aniversario de la Revolución Islámica

THE INDEPENDENT, REUTERS, AFP

Bagdad, 11 de febrero. Estados Unidos dio un paso más hacia la confrontación militar con Irán al acusar hoy a los "más altos niveles" del gobierno iraní de suministrar bombas "sofisticadas" a la resistencia iraquí que, aseguró, han causado la muerte a 170 soldados estadunidenses y herido a 620, mientras que en Teherán, el presidente Mahmud Ahmadinejad encabezó las celebraciones masivas por el 28 aniversario de la Revolución Islámica y reiteró que su país no renunciará a sus programa de desarrollo nuclear, aunque sí está dispuesto a dialogar.

Altos mandos del ejército de ocupación en Bagdad mostraron a la prensa partes de proyectiles de mortero de 81 y 60 milímetros, así como un pedazo de los llamados "penetradores explosivos" (EFP, por sus siglas en inglés) de fabricación iraní, introducidas de contrabando a Irak y entregadas a milicias chiítas que rechazan la presencia de tropas extranjeras.

Un explosivo del tipo EFP colocado a la orilla de una carretera o una calle es capaz de penetrar el blindaje de un tanque Abrams, que integran la mayoría de los batallones de blindados estadunidenses en Irak.

"Las armas tienen las características únicas de las que son fabricadas en Irán, único país en la región que las produce", dijo un oficial de la fuerza militar estadunidense, que habló a condición de mantener el anonimato.

"Consideramos que estas acciones (el contrabando de armas) proceden de altos niveles del gobierno iraní", dijo el militar, que además precisó que la denominada Brigada Al Quds (Jerusalén) es la que utiliza en Irak los pertrechos fabricados en Irán y responde directamente a las órdenes del ayatollah Ali Jamenei.

Según los militares, Irán no sólo influye sobre la Brigada Al Quds sino también tiene varios grupos bajo su control y provisión en Irak, incluidos algunos disidentes del Ejército del Mehdi, encabezado por el clérigo radical chiíta Moqtada Sadr.

Las acusaciones hechas este domingo por el mando estadunidense se agregan a una serie de acciones realizadas por Estados Unidos para tratar de exhibir a Irán en el conflicto iraquí, medidas contrarias a las sugeridas el año pasado por la comisión encabezada por el ex secretario de Estado James Baker, y el ex congresista demócrata Lee Hamilton, que elaboró un reporte sobre los conflictos en esta región y sugirió el diálogo con Teherán.

Además de haber reforzado su presencia naval en el golfo Pérsico en el último mes, fuerzas estadunidenses arrestaron en enero a cinco funcionarios iraníes en oficinas establecidas en la localidad de Arbil, la capital de la provincia kurda, en el norte de Irak.

También el mes pasado, un diplomático iraní fue secuestrado en Bagdad por miembros de un comando militar iraquí que opera regularmente bajo la influencia de oficiales del ejército estadunidense.

El secuestro ocurrió días después que el presidente George W. Bush afirmara que los iraníes a quienes se les descubriera identificando a tropas estadunidenses como "blanco", se convertirían en objetivo a matar de las tropas de Washington.

La presentación del mando estadunidense de ocupación subrayó hoy los nexos de la resistencia con milicias chiítas, pero la tropa de Estados Unidos enfrenta mayor beligerancia de parte de las organizaciones sunitas, que con frecuencia están dirigidas por iraquíes que formaron parte del ejército del despuesto y ejecutado presidente Saddam Hussein.

De acuerdo con una nota que este lunes publica el diario británico The Independent, la información de los militares estadunidenses es inconsistente por el hecho de que los dispositivos a los que considera exclusivos de Irán en esta región, han sido utilizados por fuerzas armadas en la lucha de independencia irlandesa de 1919-1921 y por todos los ejércitos involucrados en la Segunda Guerra Mundial.

Además, de los tres mil 103 soldados estadunidenses muertos en Irak, alrededor de mil 190 fallecieron a causa de "dispositivos explosivos improvisados", elaborados principalmente por desechos de artillería del ejército de Hussein.

La información sobre los EFP fue divulgada el mismo día en que el ex director de la oficina sobre Irán y el golfo Pérsico del Consejo de Seguridad Nacional, Hillar Mann, afirmó que la Casa Blanca ha optado por tomar una actitud provocadora frente a Teherán.

"Pretenden ser lo más provocadores posible para lograr que los iraníes hagan algo que obligue a estados Unidos a responder", dijo Mann.

Al celebrar este domingo el vigésimo octavo aniversario de la revolución islámica de 1979, el presidente Ahmadinejad se refirió en su discurso central al conflicto de Irak, país con el que Irán libró una guerra en la década de los 80, auspiciada por Estados Unidos para tratar de debilitar al nuevo régimen.

"Somos un amigo de Irak. Tenemos una cultura e historia común y la estabilidad, seguridad e integridad de Irak representan la estabilidad, seguridad e integridad iraní", dijo Ahmadinejad el domingo en un mitin en Teherán donde se conmemoró el aniversario de la revolución islámica de 1979.

"Ustedes nos envían un mensaje pidiéndonos que los ayudemos en Irak, pero no escuchan nuestros consejos y en vez de eso nos arrestan a unos cuantos", dijo Ahmadinejad.

Paralelamente, en Munich, donde se realiza la Conferencia Internacional de Seguridad, el negociador oficial iraní, Ali Larijani, dijo que la ocupación estadunidense de Irak es la causa del conflicto que vive actualmente el país vecino.

"La gente siente heridas sus convicciones religiosas al ver la presencia de soldados estadunidenses", puntualizó.

Ante cientos de miles de personas reunidas en la plaza Azadi (Libertad) de Teherán, el mandatario elegido en 2004 reiteró la negativa de su gobierno a parar sus planes de desarrollo atómico en una decena de instalaciones ubicadas en varias regiones del país.

"Estamos listos para negociar, pero no suspenderemos nuestras actividades", dijo Ahmadinejad, quien subrayó que detener el programa nuclear significaría una "humillación" para Irán y que antes del 9 de abril daría conocer avances de los trabajos técnicos iraníes.