Se refuerza la vigilancia en aeropuertos, ante eventuales ataques del narcotráfico
Atribuyen a Los Zetas las recientes ejecuciones de policías en Acapulco
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Aspecto del sepelio de los agentes ministeriales que fueron asesinados el martes en Acapulco a manos de sicarios
Foto: J. Guadalupe Pérez
Un grupo de sicarios que forma parte del brazo armado del cártel del Golfo, conocidos como Los Zetas, ha sido señalado como responsable de las ejecuciones de siete personas en Acapulco (cuatro policías municipales, dos empleadas administrativas y un agente ministerial).
Mientras, ante informes de un posible ataque del narcotráfico a instalaciones estratégicas, el gobierno federal ordenó el reforzamiento de la seguridad en las terminales aéreas del país, revelaron fuentes gubernamentales.
Asimismo, reportes de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) elaborados en 2005, que han sido tomados en cuenta por la nueva administración federal, señalan que grupos de sicarios ahora se trasladan por aire de un punto a otro del país, mientras su armamento es transportan en vehículos con compartimientos para ocultar armas.
Con respecto a lo sucedido en Acapulco, Guerrero, el pasado martes, los funcionarios consultados señalaron que, de acuerdo con las primeras investigaciones, los atacantes de los policías municipales forman parte del cártel del Golfo.
Según las mismas fuentes, la intención de estos sicarios "es atraer la atención hacia el puerto turístico, con el propósito de que disminuyan las acciones emprendidas en la Costa Grande y en la serranía guerrerense".
Por otra parte, la realización de al menos cuatro cateos a distintos inmuebles permitió localizar, además de dos vehículos que fueron utilizados en los ataques a los policías municipales, armamento de grueso calibre, granadas de fragmentación similares a las utilizadas en los atentado y documentos que vinculan estos hechos violentos con un plan para desacreditar los operativos contra la delincuencia y provocar que los efectivos militares y policiacos desplegados en la Costa Grande de Guerrero se concentren en Acapulco.
Sin embargo, indicaron los funcionarios entrevistados, el gobierno federal cuenta con elementos suficientes para llevar a cabo nuevas acciones y ampliar su despliegue a otras zonas de esa entidad.
Además, las primeras investigaciones han establecido que existe una "probable infiltración" de grupos del narcotráfico en corporaciones policiales municipales de Guerrero, ya que uno de los agentes muertos del cual no se precisó su nombre, el 19 de enero había sido objeto de un atentado del cual salió ileso, pero se presume su involucramiento con el cártel de Sinaloa.
Por otra parte, los funcionarios entrevistados mencionaron que en los próximos días la policía federal, en coordinación con el Ejército, efectuará operaciones especiales para "atacar objetivos específicos", es decir, contra integrantes de alguna organización dedicada al trasiego de droga, como ocurrió con los cinco integrantes del cártel de Juárez que fueron detenidos el pasado 5 de febrero en Ciudad Juárez, Chihuahua, que presuntamente integraban una célula dedicada al trasladado y lavado de dinero.
En ese contexto, las autoridades federales tienen información de inteligencia que hace presumir que los cárteles de la droga intentarían realizar acciones contra instalaciones estratégicas.
Por ello, aunque no se ha elevado el nivel de alerta en las terminales aéreas, la policía federal (integrada por la Policía Federal Preventiva y la Agencia Federal de Investigación) desplazó a un mayor número de elementos e incrementó las medidas de revisión de los pasajeros. Lo anterior, debido a que información obtenida por la Unidad Especializada en Tráfico de Armas y Terrorismo detectó que desde 2005 grupos de sicarios han modificado su manera de operar en cuanto a sus traslados por el territorio nacional y ahora, en lugar de movilizarse en grupo, lo hacen en forma individual y sus armas y vehículos se mueven por tierra.
Al menos cuatro vehículos, la mayor parte de ellos incautados al cártel del Golfo, contaban con compartimentos secretos en los cuales se escondían armas largas y uniformes falsificados.