Amanece la ciudad con lluvia y niebla; reactivan el operativo Ajusco
Pronóstico de que continuará el frío mantiene en alerta al GDF
Capitalinos que se quedaron aprovechan día de asueto para disfrutar nieve y paisaje
Ampliar la imagen La mañana de ayer el Ajusco amaneció con nieve debido a las bajas temperaturas que se han registrado en los dias recientes. En la imagen, familias aprovecharon el día de asueto para disfrutar del paisaje invernal Foto: Alfredo Domínguez
La ciudad de México amaneció ayer con una pertinaz lluvia y una tenue neblina que cobijó todo su territorio, acompañadas de temperaturas de hasta dos grados centígrados, particularmente en la parte alta del cerro del Ajusco, en la delegación Tlalpan, que luce con un manto blanco debido a la caída moderada de nieve.
Lo anterior obligó a cerrar por cinco horas el tránsito vehicular y los accesos hacia el área boscosa en los valles de La Cantimplora y del Tezontle, así como Tres Cruces, donde la capa de hielo alcanza hasta los 3.5 centímetros sobre la vía asfáltica, según reportó el director del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), David Vera.
Desde muy temprano autoridades de Protección Civil de Tlalpan, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina, reactivaron el denominado operativo Ajusco para monitorear la zona afectada por las condiciones climatológicas derivadas de los resabios del frente frío número 35 que impacta la zona centro del país.
Desde las ocho de la mañana y hasta después del mediodía se mantuvo cerrado el paso a los parajes La Cantimplora y Tezontle, localizados cerca del poblado de San Miguel Ajusco y en el albergue Alpino, donde se registró la precipitación de aguanieve, en el tramo que va desde el kilómetro 24 al 31 de la carretera Picacho-Ajusco.
Salvador Rojas, responsable de Protección Civil de la delegación Tlalpan, detalló que durante el transcurso del día se habilitaron tres puestos de mando, uno en el valle de La Cantimplora, otro en el paraje Las Cruces y uno más en la intersección conocida como la Y, para auxiliar a los visitantes que aprovecharon el día de asueto para disfrutar del paisaje invernal.
Acciones preventivas
A estas acciones se sumaron elementos de Fuerza de Tarea, del Grupo Especial Metropolitano, ERUM de la SSP y policías preventivos de los sectores Fuente, Padierna y Huipulco, en Tlalpan, quienes realizaron recorridos de vigilancia por la zona, a fin de prevenir incidentes.
Los esfuerzos se concentraron principalmente a la altura del kilómetro 16 de la carretera Picacho-Ajusco, en la zona conocida como la Y, donde se instaló una ambulancia del ERUM con personal médico para atender cualquier urgencia.
Los uniformados instruían a los visitantes a no internarse en los bosques, abstenerse de llevar bebidas alcohólicas y manejar con extrema precaución, debido a que la intensa niebla que se depositó en la zona no permitía la visibilidad más allá de los 15 metros, mientras que a los pobladores se les recomendó no encender anafres dentro de las viviendas y consumir líquidos claros abundantes, como agua, té o consomé.
Rojas explicó que al atardecer se registró una moderada caída de nieve en el paraje Las Cruces, sin llegar a acumularse ni alcanzar el poblado de Santo Tomás Ajusco, considerado el poblado más cercano.
A partir de las siete de la noche, con el apoyo de la SSP, se comenzó a desalojar a los visitantes, quienes tuvieron que caminar largos trayectos para conseguir la nieve para bajar con el tradicional muñeco.
Por su parte, en un comunicado el gobierno capitalino indicó que mantendrá en alerta el programa emergente de Protección Civil, en particular en las cinco delegaciones más vulnerables: Cuajimalpa, Alvaro Obregón, Tlalpan, Milpa Alta y Magdalena Contreras, dado que el pronóstico del tiempo indica que se mantendrán las bajas temperaturas, con presencia de lluvias escasas y potencial de nevadas en las zonas montañosas de la capital.
Elías Miguel Moreno Brizuela, eventual secretario de Protección Civil, precisó que el domingo y el lunes han sido los días más fríos de la temporada invernal, en la que se ha mantenido saldo blanco, pues no habido ni muertes ni afectaciones graves que lamentar.