Nada nos detendrá para elevar estándares de calidad: funcionario
Desestiman en Benito Juárez denuncias de maestros y trabajadores de casas de cultura
El director de Desarrollo Social de la delegación Benito Juárez, Bernardo Lartigue, sostuvo que "nada detendrá" a la administración de Germán de la Garza para hacer eficientes las casas de cultura de la demarcación y equiparar su funcionamiento al de escuelas, más que a centros de esparcimiento.
El funcionario señaló que el sistema para las casas de cultura y centros de desarrollo implementado por la nueva administración implica la evaluación del personal, su revisión curricular sin contar sus años de experiencia docente impartida en esos centros, además del aumento en el cobro de cuotas a los usuarios.
Las medidas, dijo, pretenden mejorar el funcionamiento integral tanto en la calida de la enseñanza, como en el manejo de los recursos y la infraestructura en los centros, a fin de alcanzar la autosuficiencia económica, aun cuando el Gobierno del Distrito Federal destina un presupuesto específico para la operación de los espacios culturales en todas las demarcaciones, incluida Benito Juárez, que reúne 50 por ciento del total de las casas de cultura.
En entrevista, Lartigue admitió que "se están haciendo muchos ajustes, tanto de horarios, profesores y personal administrativo, porque desde octubre estamos avocados a una transformación". Las medidas adoptadas, dijo, "obviamente generan el disgusto y la inconformidad" en parte del personal. Sin embargo, minimizó el descontento expresado por trabajadores de 15 casas de cultura y de los centros de desarrollo de la delegación, quienes denuncian acoso laboral por parte de las autoridades, al afirmar que 97 por ciento de sus empleados aún laboran con la nueva administración.
Señaló que "sólo cinco o seis de 300 maestros" han salido y fue, aseguró, porque no les convenía el nuevo esquema de pago. "No se puede funcionar a capricho de una o dos personas, se tiene que funcionar con reglas claras de operación", dijo el funcionario, y argumentó que el retraso para firmar nómina se debe a que durante el primer mes del año el proceso para definir la plantilla laboral es más tardado.
El funcionario también reconoció que dentro de los estándares de calidad que busca la actual administración se aplicarán evaluaciones al personal, sobre todo al personal docente, y los que no acrediten con documentos su capacidad de enseñanza no podrán permanecer en las casas de cultura de la delegación, aun cuando hayan prestado sus servicios por varios años en dichos centros.
Agregó que actualmente se está en pláticas con la Secretaría de Cultura del Distrito Federal, a fin de establecer mecanismos que certifiquen la capacidad de los profesores de los diferentes talleres y cursos.
¿Mientras se realiza ese proceso para la certificación qué va a pasar con los profesores que no cuentan con documentos o certificados de instituciones, pero que han prestado sus servicios durante varios años en las casas de cultura y cuentan con la experiencia para ello?
Se trata de cuatro casos perfectamente identificados y se van a revisar. Y expresó que si no se cuentan con esos certificados no existe manera de avalar sucapacidades, por lo tanto, no garantizó que personal docente, al que denominó como talleristas, puedan permanecer bajo los centros administrados por la delegación Benito Juárez con presupuesto del gobierno central del Distrito Federal.