Esta actividad y el robo de piedra de monte pone en peligro los bosques de la zona, advierten
Decomisan comuneros de Milpa Alta camión con madera talada de forma clandestina
El vehículo transportaba nueve troncos sanos; los presuntos talamontes lograron escapar
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El escritor Paco Ignacio Taibo II, el jefe de gobierno Marcelo Ebrard y su esposa, Mariagna Pratts, durante su recorrido por el Parque de la Ballena, en la colonia San Simón
Foto: Roberto García Ortiz
El deterioro de los bosques de Milpa Alta es originado principalmente por la tala clandestina y el robo de piedra de monte que realizan diversos grupos, no sólo de la misma delegación sino de estados que limitan con el Distrito Federal, sin que las autoridades intervengan, denunciaron comuneros, quienes el pasado viernes detuvieron un camión cuando bajaba la madera y decomisaron los troncos que transportaba.
Los comuneros señalaron que para resguardar la zona boscosa de Milpa Alta, la misma comunidad se ha organizado para llevar a cabo la vigilancia, pues la zona, indicaron, es codiciada por las madereras.
El decomiso que realizaron de nueve troncos sanos de 2.50 metros por 60 de diámetro, podría ser pequeño, comentaron los pobladores; sin embargo, las extensiones por la tala clandestina demuestran que el problema de la deforestación sigue siendo grave y afecta a la ciudad, porque los "bosques son pulmones para el Distrito Federal".
Durante el decomiso, los dos sujetos que estaban a bordo del camión que transportaba los troncos se dieron a la fuga. Pese a que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF y comuneros realizaron recorridos por las calles de la zona, los presuntos talamontes lograron escapar.
Por el cuidado de las zonas verdes, que incluso están considerados como áreas de conservación, la comunidad ha protagonizado serios enfrentamientos con habitantes de poblados que están en la misma delegación.
El pasado 8 de marzo de 2006, la tala clandestina de árboles y el robo de piedra provocó un enfrentamiento entre comuneros de Villa Milpa Alta y pobladores de San Salvador Cuautenco.
En dicha ocasión los representantes de los nueve pueblos que integran Villa Milpa Alta hicieron un recorrido para valorar los daños provocados por los taladores, quienes habían cortado los árboles durante la madrugada para no ser sorprendidos. En la revisión detuvieron a siete personas que cargaban piedra de monte y a un hombre que cortaba madera.
Los sujetos fueron identificados como habitantes de San Salvador Cuautenco y detenidos por la comunidad; sin embargo, la habilidad para salir del bosque y la tardanza del apoyo de la autoridad estuvo a punto de generar un enfrentamiento.
A casi un año de dicha confrontación, por la cual también se retuvo a funcionarios del gobierno de la ciudad y de la delegación de Milpa Alta, los bosques aún padecen los problemas de la tala indiscriminada y los comuneros manifiestan que seguirán con la defensa pese a las confrontaciones.
Sobre el camión que se detuvo y la madera, manifestaron que fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes.