Sara Latife Ruiz divide opiniones en el tricolor por sus bienes y actitudes
Amagan con recurrir al TEPJF si persiste la guerra sucia en el PRI
De mantenerse la guerra sucia, el dispendio de recursos y la inequidad en las campañas de los aspirantes a la directiva nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el proceso puede llegar a "una severa impugnación" ante el Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), advirtió Alejandro Gárate Uruchurtu, quien forma parte de una de las cinco fórmulas que se disputan el liderazgo tricolor, luego de señalar que en esta elección interna el partido se juega la credibilidad social y, con ello, su futuro.
Gárate Uruchurtu lamentó que desde sectores priístas se pretenda "torpedear" el prestigio de Sara Latife Ruiz Chávez, compañera de fórmula de Enrique Jackson y a quien calificó como una "política honorable" con la publicación de informes respecto de su presunta participación en un giro negro, de los conocidos como table dance, en Quintana Roo.
En Campeche, la presencia de Sara Latife Ruiz en la plenaria de los diputados del PRI causó molestia entre sus compañeros, sobre todo porque está con licencia para competir por la secretaría general del partido y debido a que el coordinador, Emilio Gamboa Patrón, primero llamó a no dividir al grupo y posteriormente se solidarizó con la compañera de fórmula de Enrique Jackson Ramírez.
"Nuestra solidaridad con Sarita por la campaña sucia de que está siendo objeto", expresó Gamboa luego de que la diputada con licencia se presentó en la reunión.
La propia aspirante a secretaría general del tricolor defendió su presencia en la plenaria priísta, con el argumento de que fue electa en su distrito y que no acudió "en calidad de candidata".
Latife Ruiz se negó, asimismo, a referirse a las versiones que la identifican como propietaria de un table dance en Cozumel. "No voy a hablar de ello", atajó.
Un grupo de priístas condenó, de manera soterrada, la presencia de Latife en el conclave priísta con el argumento de que encubría intereses electorales.
Mientras que el gobernador de la entidad, Juan Carlos Hurtado, consideró que en las circunstancias del tricolor, como tercera fuerza política, no le conviene ahondar las fricciones que sólo llevarían a una ruptura ni propiciar los golpes bajos entre los candidatos a asumir la dirigencia nacional.
El riesgo de fractura, dijo, existe y podría superarse si los priístas apelan a su compromiso con el partido y que los candidatos participen en el proceso interno "de una manera limpia, transparente, para que a final de cuentas los resultados se respeten, y gane quien gane, los demás se agrupen en torno a él, para que podamos trabajar por el partido".
También rechazó la intervención de los gobernadores surgidos del PRI en la renovación del Comité Ejecutivo Nacional, y consideró prudente que asuman una posición de vigilancia para que el proceso "se realice con equidad, con seriedad y libertad".
En tanto, en la ciudad de México, Gárate Uruchurtu manifestó que "esta guerra sucia y la inequidad en las campañas" podrán ser causa de una impugnación por la vía de los procesos y las instancias internas del partido y en un momento dado podría llegar hasta el TEPJF.
Insistió en que si se mantienen las tendencias de marcar línea a los consejeros que habrán de sufragar, de favoritismo, de manifestaciones abiertas o inclusive dados cargados, procederá a impugnar el proceso ante las autoridades federales.
"Si la elección no fuera limpia y transparente, absolutamente, me voy hasta el final", dijo, y recordó que hay antecedentes de impugnaciones en el interior del tricolor en contra de candidatos a la presidencia nacional del PRI y gobernadores.
En tanto, en Tamaulipas, de frente a la elección de la nueva dirección del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, el gobernador de esa entidad, Eugenio Javier Hernández Flores, volvió a manifestar su preferencia por la tlaxcalteca Beatriz Paredes Rangel.
Por otra parte, en Durango, Paredes Rangel pidió a la Comisión de Asuntos Internos de su partido que investigue el tema de la renovación del Consejo Político del PRI en Guanajuato con "militantes fallecidos" y aplique castigos si es necesario. Ayer jueves, La Jornada publicó la denuncia de Alejandro Arias Avila, dirigente del Movimiento Territorial de Guanajuato en donde señalaba la manipulación del consejo político de la directiva estatal con la plena intención de beneficiar a Enrique Jackson.
Con información de Martín Sánchez Treviño, Saúl Maldonado, corresponsales