Inicia su gira en Alemania; precisa que él ganó las elecciones por más votos que Merkel

Los capos extraditados mantenían su poder y ejecutaron jueces: Calderón

Ante empresarios locales presenta un México sin inflación y con grandes ventajas para la inversión

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

Berlin, 25 de enero. A menos de una semana de que el gobierno mexicano extraditó a 15 personas ­entre ellas varios capos del narcotráfico­ a Estados Unidos, el presidente Felipe Calderón reveló que tomó esa decisión porque, desde la cárcel, dichos delincuentes mantenían el control de sus cárteles, habían ejecutado a varios jueces mexicanos y estaban amenazando a otros, lo mismo que a fiscales, empresarios y ciudadanos.

Empeñado en convencer a empresarios alemanes de invertir en México, en el primer punto de su gira por Europa, Calderón Hinojosa aseguró que existe estabilidad económica y política en el país. Reconoció así que la elección del 2 de julio fue ''cerrada, sí, muy competida'', pero en cualquier caso ­dijo­ México está en paz.

Exitos en cine y pistas atléticas

Durante su estancia de diez horas en el tercer país más rico del mundo, el mandatario hizo todo lo posible por vender la imagen del México ganador o, como dijo, de erradicar la mala idea de que está frenado por la mediocridad, y para ello habló de personalidades como el cineasta Alejandro González Iñárritu y la corredora Ana Gabriela Guevara. Optimista, explicó que debería agregarse la M al llamado grupo BRIC, de naciones en ascenso, integrado por Brasil, Rusia, India y China.

Esta visita de trabajo también significó su rencuentro con Angela Merkel, surgida de la alianza conservadora Unión Cristiano Demócrata y la Unión Social Cristiana, con quien el panista comparte ideología partidaria. Sin importar las diferencias entre ambos países, el mandatario mexicano inclusive se comparó con la primera mujer canciller de Alemania, y aseguró que el 2 de julio ganó por un margen de votos superior al que llevó al triunfo a la alemana.

La primera escala de su gira, que abarcará Suiza, Reino Unido y España, se inició a las 11:35 de la mañana (hora local) en Berlín. En el aeropuerto internacional de Tegel, él y su esposa, Margarita Zavala, fueron recibidos con honores militares, lo mismo que en el palacio Bellevue, por el presidente federal de Alemania, Horst Köhler.

Luego de sortear las protestas que mexicanos y alemanes realizaron en su contra en la residencia del presidente anfitrión, Calderón llevó a cabo un encuentro privado con decenas de empresarios que integran la Cámara México-Alemania de Comercio, a quienes les presumió los avances logrados en lo político, económico y en materia de seguridad pública. Como abogado, dijo que está determinado a hacer de México un país de leyes, y por ello está librando un combate frontal a la corrupción, a la ilegalidad y al contrabando.

En su afán por vender los primeros avances de su gestión, señaló que no ha dudado en actuar ''de manera enérgica'' desde el primer día del gobierno, conjuntando a las policías federales y a los militares.

En este contexto justificó la extradición a Estados Unidos de los narcotraficantes Osiel Cárdenas Guillén, líder del cártel del Golfo; Gilberto Higuera, El Gil, e Ismael Higuera Guerrero, El Mayel, de la organización de los hermanos Arellano Félix. En este grupo también destacan Héctor El Güero Palma Salazar, del cártel de Sinaloa; Gilberto Salinas Doria, del de Juárez; José Alberto Márquez Esqueda, de la organización de los Arellano, y Gracielo Gradea Carrasco.

El presidente mexicano reafirmó esta postura cuando, en conferencia de prensa conjunta con Merkel, dijo que sus operativos de seguridad más que ahuyentar las inversiones van a detonarlas.

Como el michoacano no había visitado Europa como presidente electo, en su plática tuvo que remontarse a las elecciones del 2 de julio y reconocer que fueron cerradas y competidas, pero al final de cuentas afirmó que se demostró la fortaleza de las instituciones mexicanas.

Sabedor de que el tema aún genera dudas en los países que visita, insistió en que México está en paz a pesar de los momentos de tensión que se vivieron el año pasado, y puso como ejemplo la aprobación del paquete fiscal por unanimidad en el Congreso y la existencia de autoridades electorales ''fuertes, integradas'' y autónomas.

De hecho, dijo que debía aclarar un punto: ''Que yo gané por un margen de votos superior al de la señora Angela Merkel'', lo que provocó algunas risas entre los asistentes.

En el terreno económico presentó un México sin problemas de inflación, con tasas de interés bajas, una bolsa de valores que rompe máximos históricos y que ha logrado diversificar sus exportaciones más allá del petróleo. Sin embargo, reconoció que también necesita emprender una serie de reformas en el sector energético, para que haya un ''mercado laboral más flexible'' y ampliar la infraestructura, punto en el que, dijo, hará una apuesta por la inversión privada.

Calderón no hizo solo la tarea de promoción del país, porque en Alemania se le unieron el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, José Luis Barraza, y Valentín Díez Morodo, del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales. El primero explicó que buscan dar la imagen de un México competitivo, aunque aún se debe trabajar mucho para atraer a los inversionistas.

Luego de sostener reuniones con directivos de Daimler Chrysler y de Volkswagen, Calderón cerró su estancia entrevistándose con la canciller Angela Merkel. Al final, ambos ofrecieron una conferencia de prensa.

Merkel anunció que invitó al presidente mexicano a participar en el Encuentro Aurich, que tiene lugar durante la conferencia del Grupo de los Ocho, y luego refirió que México es el socio comercial más importante para la Unión Europea en América Latina, región con la que quieren desmantelar los tradicionales obstáculos comerciales.

Al término del encuentro, Calderón y su comitiva abordaron el avión presidencial rumbo a Zurich, Suiza, desde donde se trasladarán mañana al Foro Económico Mundial de Davos. Ahí ofrecerá una conferencia y tendrá varias reuniones con diversas personalidades, entre las que destacan el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva; el dueño de Microsof, Bill Gates, y el presidente de la Organización Mundial de Comercio, Pascal Lamy.