Sólo si se incrementa más la tortilla debe intervenir el BdeM, señala en estudio
Aplaude CEESP el pacto y desaconseja más salario
Al tiempo de calificar de "focalizada y limitada" la intervención del gobierno para estabilizar el precio de la tortilla con el pacto firmado el 18 de enero con empresarios del ramo, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) no descartó que de seguir al alza el precio del alimento el Banco de México (Bde M) debe intervenir para evitar afectaciones a la inflación.
Sin embargo, puntualizó que aun cuando se han registrado "variaciones excesivas" en el rubro de alimentos y se ha generalizado la idea de que "todos los precios deben ajustarse y que el fenómeno inflacionario está fuera de control", el alza de la tortilla tendrá un efecto temporal y no ha repercutido en el nivel general de precios, por lo que es innecesario ajustar la política monetaria.
Tampoco admitió que se autoricen aumentos a los salarios ni se otorguen subsidios al consumo porque distorsionarían el mercado y resultarían contraproducentes.
Para el CEESP, el gobierno debe realizar cambios estructurales, como destinar mayor inversión y recursos tecnológicos al campo, además de llevar a cabo "una supervisión constante de la cadena productiva del maíz para evitar posibles irregularidades en la producción y en la comercialización (...), ya que no se descarta la manipulación de precios del grano o el acaparamiento de algunos oportunistas que estén coludidos para restringir la oferta a fin de encarecerlo y elevar su precio".
Para el organismo el alza a la tortilla tiene origen en la caída en la oferta nacional del maíz y la baja productividad agrícola, pero también en la exportación anticipada de excedentes y el acaparamiento.
Si bien el CEESP reconoció que las recientes fluctuaciones en los precios han causado "cierta incertidumbre en los mercados" desestimó que se haya generalizado, al explicar que el efecto de la tortilla se reflejó en el llamado componente "subyacente" del índice inflacionario, mismo que no resulta tan volátil como en el "no subyacente", donde se aglutinan otros productos que a menudo registran incrementos bruscos en sus precios por cambios en su producción, debido a factores climáticos o estacionales, como ocurrió con el jitomate.
"No obstante, si el cambio en los precios de la tortilla continúa o es mayor al esperado y comienza a tener un efecto directo sobre las expectativas inflacionarias y el Indice Nacional de Precios al Consumidor, entonces no se descarta que el Bde M tome medidas para revisar los precios que afectan la dinámica de la inflación o que generen mayores expectativas en el mercado", precisó el Ceesp en su análisis Precios, inflación, productividad y salarios.
Respecto al Acuerdo para Estabilizar el Precio de la Tortilla firmado el jueves pasado por el gobierno federal, productores y distribuidores del maíz y la tortilla, sentenció que se trata de una "medida temporal" y que la intervención de las autoridades es "focalizada y limitada" para amortiguar el efecto causado en el bolsillo de los consumidores.
Para el Ceesp la solución al problema "requerirá de un cambio estructural encaminado a fomentar la competencia y reforzar la vigilancia ante abusos"; se pronunció por que el gobierno destine más inversión al campo y recursos tecnológicos para aumentar su productividad del maíz y otros productos que enfrentan esa problemática.
El organismo admitió que "no faltarán oportunidades para justificar negociaciones salariales", pero acotó que los aumentos a los salarios por encima de la inflación general no están justificados y lo deseable es que se den junto con un incremento en la productividad, como en el resto del mundo.