La medida sólo es un paliativo, opina Ebrard
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubón, consideró que el acuerdo del gobierno federal con los productores y comercializadores de maíz y tortilla para fijar en 8.50 pesos el kilo del producto es insuficiente. Además, acusó a las autoridades de no haber tomado las medidas necesarias para evitar que se incrementara el valor del alimento, al conocer con antelación que eso podría ocurrir.
En su conferencia de prensa matutina, expresó que dicho pacto no resuelve el reclamo de la mayoría de la población, la cual rechaza el aumento, por lo que insistió en la necesidad de aplicar un apoyo directo, como el Programa Tortilla, que funcionó hasta 2003.
"Nos parece un paliativo. Insisto en que se requiere un cambio de política, mayor intervención del gobierno federal, y medidas inmediatas de apoyo a la mayoría de la población", señaló.
A pregunta expresa sobre las acciones que podría implementar su administración para apoyar a las familias más perjudicadas por los incrementos, Ebrard aseguró que el Gobierno del Distrito Federal es la entidad que tiene la más alta inversión social, con programas como el de pensión alimentaria, servicios médicos y medicamentos gratuitos a personas adultas mayores, y los apoyos a hijos de madres solteras y personas con discapacidad. De igual forma, dijo, la determinación de no incrementar la tarifa del Metro y dar apoyo directo a los consumidores de leche Liconsa, entre otros.
Si bien advirtió que en los aumentos influye el mercado internacional, "hay un fenómeno externo de mayor demanda de maíz en países como China e India, no es de hace una semana. Es un proceso que viene de hace varios años, y ya en 2006 había quedado muy claro que esto iba a pasar. Entonces, frente a esos fenómenos, lo que se requiere del gobierno federal es que tome las previsiones adecuadas, fijarlo como prioridad de política pública, y eso no ha ocurrido".