Martín Amaru Barrios Hernández
Guachichiles: largas cabelleras rojas.
Pames: la noche ya se enoja. Guamares: temibles hordas. Zacatecos: enojados dioses soplan.
Guajábanas, Sauzas y Tezoles: hijos de todos los soles. Copuces: caminaron por Viento de Navajas. Tepeques, Cocas y Tecuexes: temibles dolores.
Xale tomó la decisión al amaneciendo Bartolomillo antes de ser ahorcado Francisco el Cojo por los secretos de la iguana Macolia antes de ser torturado
El célebre Martinillo cuando flechaba al rojo sol Machicab cuando A la Izquierda del Colibrí le regalaba puntas de obsidiana Antón Rayado en el momento de ser tatuado por el trueno Guazqualo al despedirse de su mujer
Moquimahal en la cuesta de un cerro Gualanime platicando con los más viejos del pueblo Nacolaname después de procrear un nuevo guerrero Acuaname en sus sagradas visiones
Juan Tenzo descifrando las palabras de su hoguera Juan Vaquero con sus cuatrocientos conejos tlachicando en sierras y cielos Y con todos los brujos y ancianos de su pueblo
Decidieron hacer un tzompantli de cráneos y huesos Con los ladrones que vinieron de lejos Buscando oro y arrasando pueblos Queriendo dejar sólo restos
Con tu arco y flechas mágicas, indestructible guerrero De largas y rojas cabelleras, hordas danzantes del fuego; Realizaste plegaria y ritual para que te protegiera El más poderoso y fiero perro:
Mágico Tohueyo, Señor Ofrenda, Señor Trueno, |
Nahual de la nopalera, Indestructible hoguera Dueño de esta tierra Eres tú la guerra
Amo de praderas y de sierras Abuelo de todos los tiempos Señor del antes y del después Cabañuela de cualquier mes
Señor pedernal de obsidiana De la noche eterna De la insurrección profesa Que nace de la tierra Danos muchas cabelleras Cuídanos en la más sagrada borrachera Que no se apague la brasa de la hoguera Enséñale al extraño el rostro que
aterra
Guerrero de los torbellinos Siniestra nube de flechas Invisible cisma de remolinos La derrota para ti no está hecha
Guerrero evanescente Iconoclasta maleficente Indómito guerrero Rebelión presente
Indio salvaje Tohueyo rebelde Flechero apóstata Chichimeca hereje
Audaz ladrón de ganado Ejemplar verdugo Acechante del secuestro En ti no cabe el yugo
Ni las cárceles ni la opresión se hicieron para ti Dijeron que no tenías ni tienes civilización ¡Guerra! Gritaron los ancestros chichimecas Contra los blancos, su fuego y religión.
Las mariposas danzan La hoguera está prendida Perros y coyotes aúllan El mitote.
|
Martín Amaru Barrios Hernández (Tehuacán, 1972), poeta, defensor de los derechos humanos en comunidades indígenas y en el ambiente laboral de las maquiladoras. Es autor del poemario Códice Xantil, Fondo Editorial Tierra Adentro, Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, Universidad Autónoma del Estado de México, 2002