"Caras, quemadas y duras" en Yucatán
Con raras excepciones, la mayoría de los 500 propietarios de molinos de Yucatán expenden el kilogramo de tortilla entre 10 y 12 pesos, pero además del incremento al producto, la ciudadanía yucateca se queja de que se les pretenden vender "tortillas quemadas y duras".
Según quejas interpuestas por la sociedad civil ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), la mayoría de los molineros venden en Yucatán el kilogramo del básico entre 10 y 12 pesos, y, los menos, lo ofrecen de ocho a nueve pesos.
Las quejas más recientes derivan de que los molineros venden masa y tortillas elaboradas mucho antes de entregarlas al consumidor, y las hacen pasar como productos frescos.
El delegado en Yucatán de la Profeco, Manuel Castilla Peniche, anunció que se investigarán las presuntas irregularidades cometidas por dueños o encargados de molinos y tortillerías.
Por su parte, Nelson Alpuche Solís, dirigente de los molineros de Yucatán, afirmó que ha recibido quejas de los clientes sobre el incremento al kilogramo de la tortilla y por la "mala calidad" del producto. Manifestó que en caso de descubrir malos servicios de sus agremiados, los desafiliará de la organización gremial.
Exigen campesinos cardenistas apoyos gubernamentales "en serio"
El gobierno de Felipe Calderón debe apoyar "en serio" a los campesinos productores de maíz, como hacen las autoridades de Estados Unidos con sus agricultores, a quienes subsidia con más de 70 por ciento de sus costos de producción, exigió el dirigente de la Central Campesina Cardenista (CCC) en el noreste del país, Félix Picazo Alvarez.
Entrevistado en Monterrey, Nuevo León, Picazo Alvarez consideró que los mil pesos que el gobierno mexicano otorga por hectárea "son una miseria", que de muy poco sirven para avanzar en la producción agropecuaria, y mucho menos "para competir con nuestros socios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, dados los altos costos de los insumos, la falta de modernos implementos agrícolas y de sistemas de irrigación".
El líder de la CCC exigió establecer precios de garantía del maíz, para estimular el cultivo de ese grano básico, y que el gobierno, así como los "ambiciosos" que requieren el cereal para fabricar etanol, inviertan en el campo para mejorar la infraestructura.