Alcanza la violencia "nivel sin precedentes": Liga Arabe; mueren 27 personas en ataques

Inculpan a cuatro soldados de EU por el asesinato a sangre fría de 24 civiles iraquíes

REUTERS, AFP, DPA

Camp Pendlenton, 21 de diciembre. La justicia militar de Estados Unidos inculpó a cuatro soldados estadunidenses por el asesinato a sangre fría, el 19 de noviembre de 2005, de 24 civiles iraquíes en la ciudad de Haditha. Uno de ellos, el sargento Frank Wuterich, fue acusado de 13 cargos de asesinato.

En Irak, al menos 27 personas fallecieron, 13 de ellas en un atentado suicida en Bagdad, donde la violencia confesional alcanzó un "nivel sin precedentes", de acuerdo con la Liga Arabe, mientras el nuevo secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, cumplió su segundo día de visita al país invadido para conocer la situación sobre el terreno.

Un atacante suicida se aproximó a un centro de reclutamiento policial situado en el centro de Bagad, e hizo explotar un cinturón con explosivos que llevaba consigo, lo que causó la muerte de 12 aspirantes y tres policías, dijo el ejército estadunidense.

Los ataques dejaron otros cuatro muertos en Bagdad, mientras en el resto del país cuatro personas fueron asesinadas.

De su lado, el Ministerio de Defensa dijo que abatió a 12 "terroristas" y detuvo a 56 sospechosos por todo el país en las últimas 24 horas, en tanto que el ejército de Estados informó de la muerte de tres de sus militares en los últimos días.

El embajador de la Liga Arabe en Irak, Mujtar Lamani, se mostró alarmado por el nivel "sin precedentes" de violencia religiosa en Bagdad y en la provincia vecina de Diyala, donde se multiplican el desplazamiento forzoso de población.

En este contexto, Gates afirmó en Bagdad que el gobierno de su país está decidido a luchar por mejorar la seguridad en Irak, durante un desayuno en la base de Campo Victoria con unos 15 altos militares estadunidense que lo instaron a enviar refuerzos para enfrentar a la insurgencia y concluir el entrenamiento del ejército iraquí.

Después se reunió con el primer ministro Nuri Maliki, que se opone a un aumento del contingente estadunidense, con quien habló sobre la ayuda militar.

En Camp Pendleton, estado de California, una corte marcial inculpó a cuatro soldados estadunidenses por la muerte de 24 civiles iraquíes en Haditha, al oeste de Bagdad, luego de que uno de sus compañeros fue abatido durante una patrulla.

Entre los acusados está el sargento Frank Wuterich, que lideró las tropas y enfrenta 13 cargos por homicidio, 12 acusaciones individuales y una por la muerte de seis personas. Otros cuatro marines, entre ellos el comandante Jeffrey Chessani y el capitán Lucas McConnell, ausentes en Haditha, enfrentan cargos por su fracaso en la investigación o reporte de los homicidios.