Nuevas protestas en la embajada de México en España
Madrid, 20 de diciembre. Por quinta vez en los recientes dos meses, la embajada de México en Madrid se convirtió en el centro del repudio internacional por la actuación del gobierno federal durante el conflicto de Oaxaca y por la situación de los centenares de presos de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca. Los gritos ante la delegación diplomática fueron idénticos a los de concentraciones anteriores: "Esta embajada está ensangrentada" y "Oaxaca escucha, estamos en la lucha".
A pesar del intenso frío, unas 60 personas se concentraron ante la sede diplomática mexicana, que se encuentra a un costado del Congreso de los Diputados españoles, para alzar la voz ante lo que consideran una situación "indigna" y "alarmante". Desde el inicio de la crisis de Oaxaca, diversos colectivos de solidaridad con los pueblos indígenas mexicanos han seguido de cerca el curso de los acontecimientos, pero además se han movilizado a lo largo y ancho del territorio español. Las concentraciones, charlas informativas y manifestaciones se han sucedido en ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao, Salamanca, Pamplona, Sevilla y Zaragoza, entre otras. Que, a su vez, se han sumado a las que se han realizado en otras ciudades europeas, como Milán, Berlín, París y Londres.
En esta ocasión, los manifestantes desplegaron tres enormes pancartas orientadas hacia el Parlamento español, en las que se decía: "Alto al terrorismo de Estado en México. Solidaridad con el pueblo de Oaxaca". Asimismo gritaron consignas en favor de los detenidos y de los desaparecidos, al exigir una investigación imparcial de las denuncias de torturas y violaciones de los derechos humanos, así como la aclaración pormenorizada de la situación de los desaparecidos.
Al grito de "ni con tanques ni metralla, Oaxaca no se calla", los manifestantes intentaron, en un momento dado, cortar la calle principal; sin embargo la policía antidisturbios española lo evitó. Asimismo, se leyó un comunicado, en el que se señaló que "para nosotros esta solidaridad con el pueblo de Oaxaca tiene que ser activa como posicionamiento ético", al tiempo que volvieron a exigir la renuncia del gobernador del estado, Ulises Ruiz.