Proponen ''una visión atinada de su vastedad'' creativa
Retrospectiva del pintor y escultor en el Museo Soumaya
En vísperas de la apertura de la muestra Juan Soriano: aves de paso en el Centro de Arte Museo Nacional Reina Sofía, en Madrid, el Museo Soumaya no quiso quedarse atrás y organizó la retrospectiva Juan Soriano: santo y seña, que incluye 180 obras, entre ellas 50 pinturas y 20 esculturas, que concluirá el 26 de febrero.
Contrario a la exposición del Reina Sofía, donde el tema gira en torno de los pájaros, el Museo Soumaya (avenida Revolución y Río Magdalena, San Angel), ''propone una visión muy atinada de la variedad y la vastedad de la producción'' del artista fallecido el pasado 10 de febrero, a los 85 años de edad.
Santo y seña, de hecho, empieza en la nave mayor de Plaza Loreto, donde está emplazada su escultura-fuente monumental Sirena, que ahora se hace acompañar de otras piezas como La paloma, Dafne, Gallito, Luna, Rana y Toro.
Dentro del edificio la muestra empieza con uno de los cuadros más tempranos de Soriano, un autorretrato de 1934, cuando tenía 14 años.
Mónica López Velarde, curadora de la exposición, explica que ésta abarca tres periodos: ''uno que llamo figurativo, por la cercanía con la Escuela Mexicana de Pintura; después el abstracto, a partir de 1954, más o menos; luego lo que ocurre de los años 70, en adelante, que es casi puro color y puro azul".
Un ''atractivo curatorial" es el óleo La niña muerta (1938), que vino en préstamo del Museo de Arte de Filadelfia. También dentro del núcleo de su obra temprana abstracta, la curadora resalta dos esmaltes que habían estado en la galería Antonio Souza, pero resultan casi inéditos.
Otra faceta poco conocida, dentro de la producción de Soriano, fueron sus trabajos realizados para el proyecto Poesía en voz alta.
De 1956 a 1963, Soriano participó con escritores como Octavio Paz, Juan José Arreola y León Felipe, así como la pintora Leonora Carrington, en diseños para programas, escenografías y vestuarios.
De las 18 obras teatrales montadas, la muestra presenta bocetos y fotografías (muchas de Rodrigo Moya) de siete, entre ellas Las criadas y Electra. Inclusive, el museo reprodujo el vestido que Soriano creó para Ofelia Guilmáin en el papel de Clitemnestra, en la obra de Sófocles.
Como la Fundación Juan Soriano y Marek Keller prestó la mayoría de la obra para la muestra, también se aprovechó para traer ''las cosas de su taller, sus pinceles, lo último en lo que trabajaba. Incluimos dos obras inconclusas".