Busca evitar recortes y garantizar los apoyos federales a los estados: Carstens

Programa económico realista, con poco cambio, y en especial austero

El futuro ya nos alcanzó; sería irresponsable confiar sólo en los ingresos petroleros, dice

Se planteará una reforma para aumentar ingresos tributarios, anuncia el secretario de Hacienda

VICTOR CARDOSO

El secretario de Hacienda, Agustín Carstens Carstens, definió las principales características del Programa Económico 2007, que ayer fue presentado a la Cámara de Diputados: es inercial, porque no prevé cambios significativos respecto del aprobado para 2006; es realista y sostenible en el tiempo, para evitar posteriores recortes si no se cumplen las variables macroeconómicas previstas y para garantizar los apoyos federales a los gobiernos de los estados pero, sobre todo, es austero.

El presupuesto, dijo el funcionario, también ''busca romper con el juego del gato y el ratón, con el boxeo de sombra, que cada año se jugaba con la Cámara de Diputados para su aprobación'', y reducir la vulnerabilidad frente a la volatilidad en los precios del petróleo.

Según Carstens, estos criterios generales de política económica constituyen un primer documento donde se presenta la visión sexenal, que se complementará, posteriormente y con mayor detalle, a través del Plan Nacional de Desarrollo.

Advirtió que el país debe buscar la forma razonable de enfrentar las presiones económicas derivadas del pago de pensiones, de los proyectos de inversión productiva con impacto diferido en el gasto (Pidiregas) y la necesidad de un mayor gasto social, que podrían provocar al final del actual sexenio un déficit presupuestal cercano a 3 por ciento del producto interno bruto (PIB).

''En buena medida, el futuro ya nos alcanzó; el futuro en el cual confiar en los ingresos petroleros sería irresponsable. Creo que ya tenemos una manifestación muy clara de que el próximo año la producción petrolera va a caer; se van a hacer muchos esfuerzos durante esta administración para dar mayor capacidad financiera a Pemex, para que mantenga sus niveles de producción e incluso que los aumente'', explicó.

Añadió que dada la importancia de cumplir con los gastos de pensiones, sociales y Pidiregas, así como reforzar la capacidad del gobierno de invertir en infraestructura, promover la actividad económica y apoyar a las pequeñas y medianas empresas, ''tenemos que plantear en los próximos años una reforma que aumente los ingresos tributarios del país y que reduzca la vulnerabilidad frente a los precios del crudo. Ese es un tema que vamos a abordar en los próximos meses, vamos a empezar un diálogo con mentalidad abierta, en una tónica de reconocer cuáles son las necesidades de gasto y después ver cuál es la mejor manera de financiar esos gastos''.

Carstens Carstens señaló que la Secretaría de Hacienda pretende establecer asignaciones presupuestales que sean sostenibles ante diferentes entornos macroeconómicos, y en montos que se puedan sostener en el tiempo. ''Nuestra propuesta es que los gastos se presupuesten en términos más sostenibles, que den seguridad en el ejercicio y que si hay un escenario mejor, con excedentes, pues que se puedan repartir.

''La idea es tener presupuestos más razonables y sostenibles, y que cambiemos la dinámica que se generó en los últimos años, donde terminamos con presupuestos que no son reales y que después desembocan en una dinámica de ajustes y recortes. De alguna manera, romper con el juego del gato y el ratón, de una relación de boxeo de sombra entre la Secretaría de Hacienda y el Legislativo. Realmente hicimos un esfuerzo de presentar un presupuesto que sea razonable y sostenible en el tiempo, y que de alguna manera nos permita un diálogo más confiable con el Legislativo y con los estados''.