Este deporte, en manos de directivos ajenos y otros severamente cuestionados
Golpes bajos tienen en la lona al boxeo profesional en la capital
Réferis, médicos, anunciadores y ex dirigentes develan los vicios en la CBPDF
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A decir de réferis, médicos, anunciadores y ex directivos, el pugilismo de la capital está al borde del nocaut
El boxeo profesional en la ciudad de México está en la lona. Los "golpes bajos" han sido varios: dirigentes ajenos a este deporte y otros severamente cuestionados, manipulación de la lista de clasificación, favoritismo, obligación de los boxeadores a vender boletos de sus propias peleas, metas imposibles de cumplir, directivos que son intocables, represalias a los que denuncian anomalías, y la muerte de un pugilista, tienen a este deporte, a decir de réferis, médicos, anunciadores y ex directivos, al borde del nocaut.
Las pruebas tanto escritas como verbales las tienen representantes de cada gremio de la Comisión de Box Profesional del Distrito Federal (CBPDF) que se visita, incluso, decenas de cartas se han entregado desde el año pasado tanto al inusual órgano tripartita que dirige la CBPDF, como a Dione Anguiano, titular del Instituto del Deporte (IDDF); a la Contraloría General del DF y al mismo jefe de Gobierno , Alejandro Encinas, alertando sobre esa situación. Sin embargo, parece no haber eco a sus reclamos.
Esteban Martos Nuñez de Cáceres, médico de la CBPDF desde hace 23 años; Jorge Chavarín, ex directivo de este organismo rector; Marco Antonio Rodríguez, juez de boxeo con 18 años de experiencia, y Marlon Pérez Rebollar, uno de los anunciadores de peleas más conocidos en este deporte, acceden a hablar en distintos momentos y lugares sobre la situación imperante en esa comisión, y a sabiendas de que por su actuar se les puede cancelar su licencia o ser sancionados.
Coinciden, con sus matices, en que los problemas se acrecientan cuando Dione Anguiano lanza la convocatoria para elegir al titular de la CBPDF. Se apuntan ocho interesados y "en aras de una democratitis" integra a todos a la dirección y designa, en agosto de 2004, a José Alfredo Isselín al frente del organismo, lo que genera un choque de intereses y de estilos de dirigir.
El doctor Martos precisó que Isselín no tenía conocimiento ni experiencia en el medio boxístico, y que cuando le expuso estos argumentos a Dione Anguiano la respuesta fue: "no importa, es empresario y es millonario". Para el juez Marco Antonio Rodríguez, una muestra de ese desconocimiento era que propuso realizar 200 peleas al año, "cuando ni en las mejores épocas del boxeo capitalino se dio esa cifra".
Isselín tuvo un paso efímero en la CBPDF. Su salida se aceleró luego de que en junio de 2005 murió en Las Vegas el peleador Martín El Bombero Sánchez, quien salió sin cumplir los requisitos de exámenes médicos obligatorios, según explica el doctor Martos.
Entrevistado en sus oficinas del Velódromo Olímpico, el doctor Martos explica que el proceso para designar al titular de la CBPDF "dio también pie a que se empezaran a colar los pillos del boxeo", y cita el caso de Rafael López Sánchez y Enrique Peralta Yánez, mejor conocido como "Enrique Hernández" hijo adoptivo de Arturo Cuyo Hernández, quien es designado comisionado, y a pesar de que la ley lo prohíbe, sigue actuando como mánager, promotor y empresario de este deporte.
Dirección tripartita
De hecho, hasta la oficina de Alejandro Encinas Rodríguez llegó en julio pasado una carta firmada por 16 oficiales de ring, entre ellos Herminio Cuevas, Marco Antonio Rodríguez y Marlon Pérez, en donde detallan el actuar de esos directivos de la comisión, a lo cual añaden el hecho de que tanto ellos como los boxeadores deban vender boletos para las funciones de box en las que actúen, "si no, no hay pago de honorarios".
Jorge Chavarín, en entrevista telefónica, detalló que con la salida de Isselín se designa a tres personas al frente de la CBPDF: Raquel Castro, Carmen Pichardo y al cubano Julián Díaz, quienes al igual que Isselín no sólo desconocen el boxeo, sino que son "manipulados" por Enrique Hernández y López Sánchez, a grado tal que meten a diestra y siniestra a boxeadores a las listas de boxeadores clasificados. Incluso, esos tres dirigentes reciben quejas de boxeadores y oficiales de ring "sin que se atienda seriamente su reclamo".
Marlon Pérez afirma que es uno de los oficiales que ha sufrido represalias de los directivos de la CBPDF por denunciar esos atropellos. Sin embargo, al igual que los otros entrevistados, asegura que continuará adelante hasta limpiar y rescatar al box en esta ciudad.