Sólo se buscó evitar que la JFCA declarara inexistente el paro: sindicato Chema Martínez
Azucareros reanudaron labores ''bajo protesta'', asegura líder sindical
Irregular y sospechoso el acuerdo para hacer una pausa en la huelga, afirma Jorge Zamudio
Aunque los siete sindicatos independientes del sector azucarero reanudaron labores el viernes pasado, ello luego de que los empresarios y el Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera y Similares de la República Mexicana (STIASRM) acordaron levantar la huelga y fijar una nueva fecha límite, el 20 de enero, para la respuesta a sus peticiones, lo hicieron bajo protesta, pues a su parecer este acuerdo tiene "muy poca lógica jurídica y más bien obedece a que se buscó evitar que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) declarara inexistente la huelga''.
Jorge Zamudio Zamudio, integrante de la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores del Azúcar y Derivados Chema Martínez, precisó a este diario que el acuerdo es no sólo "irregular, sino también sospechoso", porque no se entiende que literalmente se haga una "pausa" de casi dos meses a la huelga y además no se haya solucionado ninguno de los puntos a discusión, los cuales son el pago de 3 mil jubilaciones, aumento salarial de 15 por ciento y prestaciones.
Según los gremios independientes, que aglutinan a cerca de 5 mil trabajadores de siete ingenios, la decisión de levantar la huelga fue ''por no quedar en un estado de indefensión y para proteger los intereses de los trabajadores", e insistieron en que si el sector atraviesa por esta situación, es porque el secretario general del STIASRM, Enrique Ramos Rodríguez, "entregó las jubilaciones en el año 2000 y por eso ahora los industriales se resisten a otorgar esta prestación porque ya es cosa juzgada; fue un juicio arbitral resuelto por la JFCA y ratificado por la Suprema Corte de Justicia".
En tanto, Ramos Rodríguez comentó que respecto al cálculo empresarial de que se estaban perdiendo "10 millones de pesos diarios por la huelga", ahora levantada, refirió que de ser así existía "mala fe" por parte de este sector en cuanto a aceptar otorgar las jubilaciones "porque, si hacemos cuentas, en los nueve días se habrían perdido 90 millones de pesos, y la demanda de los jubilados es de alrededor de 110 millones de pesos, entonces faltaría muy poco para cumplir con las jubilaciones".
En lo que concierne a la aseveración patronal, de que el contrato-ley es muy caro y les cuesta mil millones de pesos, el líder consideró que "eso es una mentira, ya que representa sólo 7 por ciento de la producción total.
"En realidad no es caro el contrato-ley, porque la mayor parte de los gastos son por la compra de la materia prima, la caña y otros insumos, además de los altos salarios del personal de confianza", abundó.
Según el STIASRM, "en los 15 años recientes, los trabajadores azucareros han perdido 60 por ciento de su poder adquisitivo", debido a los bajos salarios que se han otorgado, por eso insistirá en que ''el incremento de 15 por ciento al salario no es un exceso, sino una necesidad".
Por su parte, los gremios independientes remarcan que el contrato-ley que rige al sector debe ser cambiado, y se pronuncian por la negociación colectiva, es decir, que cada gremio tenga su contrato colectivo de trabajo y así negocie individualmente con su patrón. Según el STIASRM, quien cuenta con la titularidad del contrato-ley por ser el gremio que aglutina a la mayor parte de los 45 mil trabajadores permanentes y eventuales y 12 mil jubilados, ello no sería positivo, porque al ir por separado sería más probable que los patrones cometan abusos; no obstante, para los sindicatos independientes el hecho de que un solo gremio tenga la titularidad se presta para que se margine a los sindicatos más pequeños y se realicen "acuerdos cupulares que van en contra de los intereses de los trabajadores".