En Venado, propiedades del alcalde reciben más fondos públicos que comunidades pobres
En SLP, gobierno es sinónimo de personeros de los caciques locales
En la Huasteca el narcotráfico es la segunda forma de autoridad
Ampliar la imagen La noche del domingo, el delegado Zero encabezó un mitin en la plaza Los Fundadores de San Luis Potosí. La otra campaña continuó su recorrido por esa entidad este lunes Foto: Víctor Camacho
Venado, SLP, 13 de noviembre. En tierras del desierto alto, mantenidas en el olvido por el viejo régimen priísta y el nuevo (panista pero indistinguible del viejo), el Frente Campesino del Altiplano (FCA), fuera de programa, salió al paso del delegado Zero y las organizaciones de la otra campaña potosina mientras transitaban de Villa Arista a Charcas, y dieron a conocer sus reclamos, tan únicos, y a la vez tan parecidos a los de millones de mexicanos de abajo.
Como expresan en un escrito que leyeron al pie de la carretera, para ellos "gobierno" es sinónimo de "personeros de los caciques de la región y el estado", protegidos por la autoridad, y todos "cómplices en la ilegalidad". Empezaron por el presidente municipal de Venado, el panista Guillermo Martínez Guerra, "enriquecido por la corrupción", comprador abusivo de ranchos y propietario de El Clérigo, hacienda que recibe más atención e inversiones que comunidades enteras como El Laurel y 5 de Mayo, que a diferencia del rancho del alcalde carecen de agua, luz, piso firme y otros servicios.
"El gobierno panista lucra con los recursos federales y estatales", confirmaron los labriegos, entre quienes se encontraban muchas mujeres. "Antes nos vendía el agua, en pipas del municipio, por 100 pesos. Ahora ya ni eso, que porque dice que la pipa se descompuso", acusa una señora. "El presidente se esconde si lo busca una. Su secretaria dice siempre que no está."
Según el FCA, "este sujeto lucra con la vivienda que se supone es de interés social", pues exige 20 mil pesos para que la gente pueda aspirar al derecho de habitar unas modestas construcciones "de interés social" construidas en las afueras de Venado. "Los gobiernos han mentido a la gente. Los programas, si acaso hay, les sirven para hacer negocios aprovechándose de los pobres."
San Luis resiste
Este domingo, el delegado Zero se reunió durante varias horas con los colectivos, organizaciones e individuos adherentes a la Sexta declaración de la selva Lacandona en un local de la colonia San Felipe, en las afueras de la capital potosina. Quedó evidenciado que la Minera San Xavier en Cerro de San Pedro representa una auténtica estaca en el corazón de la conciencia ciudadana, una obsesión justificada y un problema que unifica a la población consciente. Sin embargo dista de ser el único problema grave en la entidad, gobernada por un panismo agresivo y aquejada de viejas y nuevas corrupciones.
Desde el que Marcos llamaría durante el mitin nocturno en la plaza Fundadores "el San Luis Potosí de la digna resistencia" para oponerlo al de "la vergüenza" que pareciera omnipresente e invencible, brotaron testimonios poderosos como el de la trabajadora y madre soltera Isabel Velázquez, quien labora hasta 16 horas diarias en condiciones humillantes, en empresas de ésas que el régimen considera modélicas: salarios de miseria, ningún derecho laboral, "exámenes" médicos vejatorios cuyos resultados nunca conocen las "examinadas", sin apoyo alguno para la educación y la salud de sus hijos.
El delegado Zero subrayó ante los adherentes que los problemas de los individuos son tan importantes como los grandes asuntos (la minera demoledora, el conservadurismo blanquiazul que invade las vidas). Aún se sumaron testimonios de la colonia Primero de Mayo del municipio La Soledad de Graciano Sánchez, donde las autoridades cometen ahora mismo fraudes con los predios de las personas mayores.
El gobierno de Marcelo de los Santos Fraga fue señalado reiteradamente como cómplice de las grandes empresas como General Motors, a la cual exime de pagar impuestos y le permite ocupar terrenos ejidales en San Juan de Guadalupe, lo mismo que autoriza el tiradero tóxico de MSX en Mexquitic de Carmona, poniendo en riesgo la salud de millares de personas.
En la Huasteca potosina, se dijo, la pobreza es tal que "no hay familia que no tenga al menos uno de sus miembros trabajando en el otro lado". En dicha zona, naturalmente rica, cunden el narcotráfico (su segunda forma de gobierno), la prostitución de niñas, con frecuencia secuestradas por los lenones, y el consumo de cocaína.
Los agricultores de la Organización Campesina Independiente (OCI) del municipio Villa de Arriaga, con una larga historia de lucha, proclamaron ante la Comisión Sexta del EZLN y decenas de adherentes potosinos: "Nosotros no nos rajamos en la lucha por la tierra".
En San Luis Potosí, faltaba más, existen los presos políticos. Juan Valdez Pérez es quizás el más antiguo del país, con 15 años en prisión por organizar a los trabajadores. Miguel Angel Wong Soto, de la Coordinadora del Movimiento Amplio Popular, fue detenido el año pasado por su activismo social y se le ha inventado una "reputación" de delincuente que muy bien retrata cómo ven los panista (y priístas) el compromiso social. Su madre está ahora en huelga de hambre solicitando su liberación, pero el gobierno santista no reacciona ante tan extrema medida.
Los colectivos Jugo Gástrico, Héroes de Ocosingo, Nuevo, Piedra de Jade y La Neta Amorfa revelaron una pluralidad tan amplia como el espectro invisible de la agraviada sociedad potosina, y el colectivo Azul se proclamó acompañante y heredero de las resistencia navistas (del doctor Salvador Nava Martínez), y participa en las luchas contra la destrucción ambiental.
* Para consultar la versión completa de las palabras de la Comisión Sexta del EZLN en Sal Luis Potosí, visite www.jornada.unam.mx