Respaldo a la FIVB con Declaración de Tokio
Tokio. La primera jornada del trigésimo Congreso de la Federación Internacional de Voleibol sirvió para disipar los intentos de escisión a través de la Declaración de Tokio, en la que se reconoce a la FIVB como la única organización en el mundo para el voleibol de sala y de playa, ante los intentos del ex director general de esa entidad, Jean-Pierre Seppey, de fundar a un organismo opositor, pues nuevamente acusó al mexicano Rubén Acosta, titular de la FIVB, "de dictadura y fraude electoral''. Acosta, con 20 años en el cargo, presentó su informe financiero con recursos obtenidos por más de 280 millones de dólares y resaltó que esta disciplina rompió todos los récords de audiencia en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, al ser el número uno con 3.5 billones de televidentes.