Usted está aquí: viernes 13 de octubre de 2006 Política Exigen a Canadá sumarse a plan de la ONU sobre derechos de pueblos indios

Miembros de AI y otras ONG entregan carta y postales en la embajada de ese país

Exigen a Canadá sumarse a plan de la ONU sobre derechos de pueblos indios

JOSE ANTONIO ROMAN

Integrantes de Amnistía Internacional se manifestaron ayer frente a la embajada de Canadá para exigir al gobierno de esa nación que se adhiera al proyecto de Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indios, que hasta ahora se ha resistido a firmar.

Junto con una carta dirigida al embajador Gaetan Lavertu, los manifestantes entregaron 839 postales en la que artistas, académicos, intelectuales, creadores, estudiantes, indígenas y miembros de organizaciones no gubernamentales (ONG) piden al gobierno canadiense suscribir dicho proyecto, que será sometido a la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Daniel Caron, jefe de la misión adjunta de la embajada, recibió la documentación y anunció que será analizada.

Durante casi una hora, los integrantes del Grupo 12 de Amnistía Internacional sección México se plantaron pacíficamente frente al inmueble de la representación diplomática, en la colonia Polanco.

Dolores Soto, coordinadora del grupo, explicó desde hace más de 20 años se trabaja en ese proyecto, que finalmente fue aprobado por mayoría en el seno del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, con 30 votos a favor, 12 abstenciones y el voto adverso de Canadá y Rusia.

Tras esta aprobación -obtenida solamente por mayoría y no por unanimidad, como se deseaba-, la presidencia mexicana del Consejo de Derechos Humanos y la delegación de Perú han anunciado que desean someter directamente al pleno de la ONU la resolución para la aprobación definitiva de la declaración.

Sin embargo, algunos estados preferirían primero debatir el texto en el ámbito de la tercera comisión de la Asamblea General, probablemente en este mes.

Tal debate podría, llegado el caso, traer nuevas modificaciones del texto, y hacerlo sin la presencia de los indígenas.

Uno de los principales motivos para que Canadá se resista a apoyar dicha declaración está vinculado esencialmente al tema de las autonomías indígenas, según se informó en una improvisada conferencia de prensa, tras la entrega de la carta y postales.

El gobierno canadiense, por ejemplo, ha pedido que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU autorice mayores consultas sobre la base del texto del presidente relator.

En la carta entregada al embajador Lavertu, Amnisitía Internacional señala que el proyecto aprobado representa el esfuerzo y trabajo de más de 20 años, además de que su contenido significa el reconocimiento de los derechos de 370 millones de personas pertenecientes a pueblos indios en todo el mundo, víctimas en su inmensa mayoría de racismo, leyes discriminatorias, desalojo de sus tierras ancestrales, desigualdad en el disfrute de los derechos económicos, sociales y culturales, entre otras muchas violaciones a sus derechos humanos.

 
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