Algunos plantean analizar la necesidad de aumentar a 18 las demarcaciones
Apoyan nuevos funcionarios propuesta de ampliar a 4 años cargo delegacional
La mayoría de los jefes delegacionales secundaron la propuesta del jefe del Gobierno capitalino, Alejandro Encinas, y se pronunciaron a favor de que en la reforma política del Distrito Federal se analice la ampliación del periodo de gobierno de tres a cuatro años y se les otorgue mayores atribuciones.
Salvo los de Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Iztacalco y Miguel Hidalgo, el resto también coincidió en la necesidad de que las demarcaciones con mayor densidad poblacional, se dividan en un futuro, para atender de mejor manera las demandas de sus habitantes.
Entrevistados por separado, luego de rendir protesta en el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, los delegados en Azcapotzalco, Magdalena Contreras, Cuajimalpa y Milpa Alta, Alejandro Carbajal, Héctor Guijosa, José Remedios Ledesma, José Luis Cabrera, respectivamente, argumentaron que tres años resultan insuficientes para llevar a fondo los proyectos y programas comprometidos durante la campaña, pues es justamente el último año de la gestión cuando comienzan a consolidarse.
Leonel Luna en Alvaro Obregón, dijo que en el caso de esta demarcación, por ejemplo, el rescate de las barrancas, que abarcan 80 kilómetros de extensión, es una problemática que no se resuelve en tres años. "Un período más de tiempo nos daría margen, para entregar mayores resultados", esgrimió.
Uriel González en Xochimilco, indicó que además de este cambio, en su caso propondría incluir en la reforma impulsar el respeto y los derechos de los pueblos originarios, pues desde su origen tienen formas de integración comunitaria, dignas de conservarse.
En el planteamiento en el hubo discrepancias fue en el de la subdivisión de las delegaciones. Francisco Chiguil de la Gustavo A. Madero, se pronunció en contra al señalar que más bien se debe consolidar la eficiencia de los gobiernos. "Dividir por dividir no resuelve los problemas de la ciudad, porque podemos tener 20 o 30 delegaciones, pero si no hay vocación de servicio y una adecuada orientación de los recursos públicos seguiremos padeciendo las mismas problemáticas", argumentó.
A su vez, Julio César Moreno de Venustiano Carranza estimó que primero habrá que analizar la pertinencia de este procedimiento, para que efectivamente sea una cuestión que beneficie a los ciudadanos y no un cambio que obedezca a un interés político para tener algún beneficio en las elecciones.
En contraste, el delegado en Iztapalapa, Horacio Martínez, dijo que si tiene previsto los recursos para echar andar la otra demarcación, sería viable tomar esta decisión, sobre todo, "para ver si así nos toca un mayor presupuesto, porque actualmente Iztapalapa no tiene el que merece".
Erasto Ensástiga Santiago, jefe delegacional en Iztacalco, dijo que más allá de ampliar el período de gobierno o dividir las demarcaciones, lo urgente es dotar a las demarcaciones de mayores atribuciones, para ampliar la gestión de los gobernantes y tener participación en las decisiones en materia de educación, transporte, vialidad y seguridad pública.
En coincidencia, la delegada en Miguel Hidalgo, Gabriela Cuevas, señaló que el problema no es de tiempos o de espacios, sino de facultades y recursos, mientras su homólogo en Benito Juárez, manifestó que en su caso no observa ningún problema en que se hagan las modificaciones jurídicas que sean necesarias.
En tanto, el delegado en Cuauhtémoc, José Luis Muñoz Soria, consideró que toda propuesta que se vincule con la Reforma Política del Distrito Federal tendrá que llevarse a consulta ciudadana. "Antes de que tome cualquier decisión al respecto, debemos partir por conocer el sentir de la gente", expresó.
Gilberto Ensástiga, titular de Tláhuac, indicó que sin renunciar a que haya una reforma política en el Distrito Federal, se debe aprovechar que el PRD tiene la mayoría en la ALDF y en las jefaturas delegacionales para impulsar una reforma interna en toda la administración pública local.
Por su parte, el dirigente del PRD-DF, Martí Batres y el diputado local, Agustín Guerrero, coincidieron en señalar que en el tema de la reforma política, independientemente de cuáles sean los cambios, los capitalinos deben tener la primera y la última palabra, a través de una consulta ciudadana o un plebiscito.