Ayer comenzó la feria nacional de ese alimento; permanecerá hasta el día 22
En San Pedro Atocpan elaboran 30 mil toneladas de mole al año
Funcionan 39 restaurantes provisionales; estiman recibir a unos 500 mil visitantes
La Feria Nacional del Mole de San Pedro Atocpan cambió por completo, en sólo 30 años, la vida económica de esta comunidad de Milpa Alta, asegura Luis Alvarado, uno de los principales productores del lugar -elabora más de 100 toneladas anuales del alimento- y fundador de la muestra, que en la actualidad es una de las cinco celebraciones más emblemáticas de la demarcación.
Si bien Milpa Alta ocupa el primer lugar nacional en producción de nopal -en Atocpan aseguran que tienen la primera empacadora que se creó en la demarcación-, esta comunidad, de alrededor de 15 mil habitantes, se disputa con el estado de Puebla el primer lugar en elaboración de mole, con una producción anual de 30 mil toneladas, algo que don Luis y los otros organizadores de la primera feria, en 1977, nunca se imaginaron.
El propósito, recuerda, era ampliar la comercialización del producto en el centro de la ciudad y hoy es toda una industria, cuya producción significa una derrama de más de 2 mil millones de pesos, y que es el sustento de 10 mil personas a las que da empleo directo.
Pero tal producción requiere del suministro de los 26 ingredientes -27 en el caso del mole almendrado-, que son traídos casi en su totalidad de fuera de Milpa Alta. Ni el estado más importante en producción de chiles, Zacatecas, le da abasto a los actopenses, quienes llegan a comprar cosechas completas de esa entidad y de Guanajuato, San Luis Potosí y Aguscalientes, en tanto que el ajonjolí se trae de Oaxaca, Guerrero y Sinaloa, sólo por mencionar algunas de sus materias primas.
La primera Feria Nacional del Mole se realizó en las afueras del pueblo, en el paraje de Yenhuitlalpan, con apenas cuatro restaurantes y cuatro puestos de mole, y no en octubre sino en mayo, durante la fiesta de la ascensión del Señor de las Misericordias, pero surgieron divisiones en el pueblo porque algunos decían que se aprovechaba la fiesta religiosa para la venta de mole, por lo que se cambió la fecha y se amplió de cuatro a 15 días, y se eligió otra sede.
Este año esperan recibir 500 mil visitantes, pero no siempre fue así. Alvarado recuerda que la feria comenzó a tener auge a partir de un desafortunado accidente, cuando en su quinta versión se vino abajo un templete de la plaza de toros y perecieron dos personas, una de ellas un mozo de espada del torero Eloy Cavazos, y además hubo unos 800 lesionados. "Al rato ya había un montón de reporteros, y el hecho fue noticia nacional", refiere.
Ahí, al frente de uno de los 39 restaurantes cuidadosamente decorados, que será una pena desmantelar al concluir de la feria, está Herlinda Olivos Ramírez, de 72 años, heredera de una de las dos primeras molenderas de San Pedro Actopan: Rafaela Olivos, quien se distinguió por tener uno de los mejores sazones para el mole en el pueblo, por lo que la invitaban a prepararlo en todas las fiestas.
Por ello su cocina, consolidada hoy en la empresa Molcalli -voz náhuatl que significa casa del mole-, asegura tener una tradición que data de 1860, lo cual la ubica en el primer lugar en calidad.
Herlinda recuerda que de niña aprendió de su madre a preparar el mole almendrado, incluso sostiene que su receta es de las primeras de esta variedad del producto, y la tradición se la ha heredado a sus hijos.
Uno de ellos, Octavio Retana Olivos, recuerda que su padre, ya fallecido, José Asunción Retana, mejor conocido como Chencho Temascales (porque en su casa tenían un temascal y así lo distinguían de otro Chencho del pueblo), fue uno de los miembros del primer comité organizador de la feria, y él le correspondió invitar a los chinelos de Yautepec, Morelos.
Le gustaba tanto la danza de ese grupo que antes de morir pidió que cuando lo enterraran hubiera chinelos y se lo cumplieron: todo el camino al cementerio fue amenizado por los danzantes morelenses.
Inaugura Encinas la feria
Ayer, Alejandro Encinas Rodríguez, jefe de Gobierno del Distrito Federal, inauguró la Feria Nacional del Mole en San Pedro Atocpan, que permanecerá hasta el 22 de octubre. Se ubica en el kilómetro 17.5 de la carretera Xochimilco-Oaxtepec, y este año rinde homenaje a las mujeres del pueblo, por su ejemplo de trabajo para el sustento familiar.