Busca que los inmigrantes salgan de la oscuridad, dice el representante de la Casa Blanca
Bush "se opone" a la construcción de muro, porque es sólo "una aspirina"
Scodatlle, Arizona, 30 de septiembre. El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, "se opone" a la construcción del muro en la frontera con México, porque considera que sólo representa una "aspirina" para enfrentar el problema de la migración ilegal, aseguró hoy aquí el representante de la Casa Blanca, Rudy Fernández.
Durante un encuentro que sostuvo con una comisión especial de legisladores del Congreso de Sonora, el funcionario estadunidense manifestó que la propuesta que analiza Washington es que los inmigrantes salgan de la "oscuridad" en la que se encuentran para poder levantar un registro de la población indocumentada que radica en este país.
Sin embargo, la noche del viernes, el Senado de Estados Unidos aprobó con 80 votos en favor y 19 en contra, la edificación de una barda de mil 125 kilómetros en la frontera con México, para intentar frenar la migración indocumentada.
Cabe destacar que el financiamiento del muro aún no está garantizado, ya que los congresistas aprobaron sólo mil 200 millones de dólares de los 6 mil millones que se requieren para la construcción de barreras físicas adicionales, mayor uso de tecnología y vigilancia.
Fernández justificó que las extremas medidas de seguridad que se han aplicado a lo largo de la frontera con México obedecen al temor de que ésta sea utilizada por terroristas para ingresar a este país luego de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
En esta reunión, el coordinador del PRD en el Congreso sonorense, Reynaldo Millán Cota, se pronuncio en favor de la revisión del Tratado de Libre Comercio, con la intención de que se incluya un apartado relativo a la mano de obra, con lo cual se podría regular el ingreso a Estados Unidos de trabajadores mexicanos.
El diputado local Mónico Castillo Rodríguez, del PT, fue más allá al acusar al gobierno mexicano de solapar las violaciones a los derechos humanos de los migrantes en su travesía rumbo a la frontera.
Puntualizó que policías de los tres niveles de gobierno, así como los propios elementos del Grupo Beta de protección a migrantes, se han dedicado a extorsionar a los indocumentados, por lo que es responsabilidad exclusiva del gobierno mexicano garantizar la integridad de los connacionales en su territorio.