Más de 20 muertos dejan combates en el país ocupado
La tortura, fuera de control en Irak: investigador de Naciones Unidas
Bagdad, 21 de septiembre. Por lo menos 23 personas murieron hoy en Irak, país que registra el índice de muertes violentas más elevado de su historia, mientras la tortura prolifera en los centros de detención y en los asesinatos sectarios, reveló la Organización de Naciones Unidas en momentos en que las tropas italianas entregaron el control a las autoridades iraquíes de la sureña provincia de Dhi Qar.
Un informe de la oficina de derechos humanos de la misión de asistencia de la ONU en Irak, indicó que 6 mil 599 iraquíes sufrieron muertes violentas en los últimos dos meses, lo que convierte ese periodo en el más mortífero, y muchas de las víctimas fueron torturadas hasta fallecer por escuadrones de la muerte debido a su religión.
La tortura "está totalmente fuera de control", dijo Manfred Nowak, un investigador de la ONU, al señalar que "la situación es tan grave que la población iraquí asegura que es peor de lo que fue en tiempos de Saddam, Hussein".
Pese a la violencia, las tropas italianas entregaron el control de la provincia de Dhi Qar a las fuerzas iraquíes. En la ceremonia de traspaso en la capital, Nasiriya, el primer ministro de Irak, Nuri Maliki, llamó a los habitantes de la ciudad a cooperar en el desarme de las milicias.
Estados Unidos espera que la seguridad del país pueda ser garantizada pronto por las fuerzas iraquíes, cuya formación podría terminar antes de fin de año por parte de sus militares. El 95 por ciento ya puede operar, aseguró el general estadunidense Joseph Peterson.
La violencia dejó hoy unos 23 muertos, 18 de ellos miembros de las fuerzas de seguridad, en distintos ataques en el país, mientras en la región autónoma kurda fueron ejecutadas 11 personas condenadas a muerte por varios asesinatos y violaciones. El Parlamento kurdo reintrodujo la pena máxima después de que fue abolida hace tres años.
En Najaf, grupos chiítas que usualmente son rivales en la gubernamental Alianza Unida Iraquí, se unieron para repudiar a Estados Unidos por arrestar al diputado Faleh Hasan Shanshal, también colaborador de alto rango del clérigo radical Moqtada Sadr.
"Poderes extranjeros realizan violaciones peligrosas en provincias pacíficas", dijo Haider Ibadi, legislador del partido Dawa, de Maliki.
Un general estadunidense comentó que las milicias del Ejército del Mehdi, de Sadr, estaban detrás de escuadrones de la muerte que atacan a sunitas.
En Afganistán, la otra nación invadida por Estados Unidos, el general Karl Eikenberry, que comanda las fuerzas estadunidenses, admitió que no tomó en cuenta la capacidad de los talibanes en el sur del país, que fueron capaces de sacar ventaja de la debilidad del gobierno afgano para establecer se en la zona.