La española interpuso demanda para evitar que la mexicana ofrezca servicios WLL
Conflicto jurídico y comercial de Telmex y Telefónica en el mercado chileno
Alega la firma europea que la empresa de Slim recibió ''opciones preferenciales''
Santiago, 10 de septiembre. Un serio conflicto jurídico y comercial protagonizan en el mercado chileno Teléfonos de México (Telmex) y la española Telefónica, por una concesión a la primera del servicio de telefonía fija inalámbrica, conocido como WLL.
Fuentes de Telmex dijeron a Notimex que el diferendo se originó por los recursos judiciales interpuestos por Telefónica para evitar que su competencia pudiera materializar sus planes de implementar el Servicio Wireless Local Loop (WLL) en Chile.
La estatal Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), organismo regulador del sector en el país sudamericano, adjudicó en diciembre pasado a Telmex una licencia a escala nacional para otorgar servicios WLL.
La resolución de la Subtel comprende concesiones en la banda de 3.400 a 3.600 MHz ofrecidas por la Subtel para el servicio WLL y que admiten la tecnología WiMax, la próxima generación de banda ancha.
Tras sus quejas por la primera subasta de WLL, en la cual la firma de telecomunicaciones Entel arrasó, la Subtel declaró de forma pública que daría prioridad a las ofertas de Telmex y de la operadora VTR en una segunda subasta.
La reacción de Telefónica se produjo en enero de este año, al presentar una demanda de nulidad a la concesión, con el argumento de que VTR y Telmex habían recibido ''opciones preferenciales''.
La empresa de capitales españoles manifestó que su intención no era retrasar las operaciones de Telmex, sino asegurar que la concesión de WLL se realice de manera justa para todos los actores de la industria.
El gerente general de Telefónica Chile, Jorge Molés, explicó que su compañía no busca que el gobierno cancele el proceso de subasta, sino que lance uno nuevo con los mismos participantes, pero que se realice ''de manera justa''.
''El objetivo (de los recursos judiciales) en absoluto es frenar nada. Lo que cuestionamos es el tema de los derechos preferentes'', agregó el ejecutivo, al pedir que se realice una nueva subasta pública con los mismos participantes.
Acusación contra Telefónica
El gerente general de Telmex-Chile, Eduardo Díaz Corona, acusó a Telefónica de ''estar obsesionados en detener nuestra entrada'' al mercado chileno, para lo cual utilizaría ''juegos'' o ''procedimientos legales''.
Para Telmex, los recursos interpuestos por Telefónica representan en la práctica un atraso de ocho meses en la puesta en marcha de su sistema WLL.
Analistas locales estiman que la disputa es un nuevo capítulo de la lucha por el liderazgo del sector telecomunicaciones en Chile, que enfrenta a Telefónica con Telmex, de Carlos Slim, propietario además de la empresa Claro, de telefonía móvil.
Telmex, que adquirió en este país la empresa Chilesat con 500 mil clientes, es el tercer operador en el mercado de larga distancia detrás de Telefónica y Entel, dentro de una participación de mercado que no dista mucho entre los actores.
En Nicaragua, la fusión de dos empresas del consorcio mexicano América Móvil, que ha invertido l50 millones de dólares en los últimos dos años, ha creado un gigante de la comunicación que controla 70 por ciento del mercado en el país.
El proceso comenzó desde que el gobierno nicaragüense vendió al grupo mexicano dos firmas de telefonía móvil y convencional a finales de 2002 y se efectuó en ''forma gradual'' hasta que llegó a la fusión, dijo a Notimex el gerente general de América Móvil, David Ibarra.
El consorcio adquirió el control accionario de la Empresa Nicaragüense de Telecomunicaciones (Enitel) y posteriormente creó ALO PCS que funcionaban en forma separada y terminaron fusionándose, bajo la nueva marca regional Claro.
En Nicaragua, el grupo controla 70 por ciento del mercado con más de un millón de clientes en móviles y 300 mil en la red fija.
La fusión administrativa, regulatoria, financiera y tecnológica ''lleva años'', sin embargo hasta hace unos meses las tiendas de servicio daban atención para ambas empresas.
Con la nueva marca, dijo Ibarra, ''esperamos quitar la incertidumbre de los clientes en cuanto a calidad del servicio y en precios. Ahora todos somos Claro'', la cual ofrecerá nuevos servicios.