Para contrarrestar efectos, Hugo Chávez incrementa la compra de arsenal a Rusia

Endurece EU el embargo de armas al gobierno de Venezuela

Impone Washington restricciones a las transferencias directas e indirectas, a partir de octubre

DPA, REUTERS Y PL

Londres, 27 de agosto. En un nuevo intento de Estados Unidos por cerrar puertas a Venezuela, el Departamento de Estado instó a las empresas de armamento estadunidenses a que, a partir del 1º de octubre, se amplíe el embargo de armas contra el gobierno de Hugo Chávez, anunciado en mayo pasado, informó la revista especializada Jane's World Defence Industry Reporter.

Según el informe, publicado en la edición de Jane's de esta semana, el embargo incluye componentes y equipamiento de armas fabricados en Estados Unidos, con lo cual no sólo refuerza las restricciones a las transferencias directas a Caracas, sino también trata de frenar las ventas por vías indirectas.

La medida podría complicar más la exportación de aviones de transporte militar fabricados en España con componentes y tecnología de Estados Unidos, señala la revista editada en Londres.

España y Brasil fueron este año objeto de presiones de parte de Estados Unidos, en momentos en que concluían un proceso de venta de equipos militares.

A principios de año, Washington reclamó a Madrid la venta de barcos, y a Brasilia la exportación de de aviones con componentes o tecnología estadunidense.

Termina relación con compañía sueca

En este contexto, la mayor fabricante de equipos militares en Suecia, la compañía Saab, anunció el 3 de agosto pasado la cancelación de sus ventas a Venezuela para cumplir con las reglas del embargo estadunidense, con lo cual dio por terminada una relación comercial de 20 años con las fuerzas de seguridad de ese país sudamericano, por medio de su subsidiaria Bofors.

Saab, que había suministrado sistemas de misiles antiaéreos y otros artefactos de artillería ligera con valor de 150 millones de dólares, explicó que los equipos vendidos a Caracas fueron parcialmente desarrollados con tecnología estadunidense.

Aunque Saab y Caracas no tenían previstos nuevos embarques para este año, las entidades venezolanas no podrán reabastecerse de municiones.

En 2004, según datos del Congreso estadunidense, las ventas de armas estadunidenses a Venezuela tuvieron un valor de 8 millones de dólares, lo cual se tradujo en la transferencia de pistolas, rifles, municiones y equipos antimotines.

En 2005, Venezuela compró a Estados Unidos vehículos, instrumentos y material militar por valor de 33 millones 900 mil dólares, lo cual incluyó refacciones para aviones de transporte castrense C-130 y otras aeronaves, según información del gobierno estadunidense.

Según el centro de análisis Global Security, con sede en Alexandria, Virginia, el embargo estadunidense a Venezuela afectará principalmente a su fuerza aérea, toda vez que de sus 277 aeronaves, 177 fueron fabricadas por empresas de Estados Unidos.

Entre los aviones estadunidenses que forman parte de la flota militar venezolana hay cazabombarderos F-16.

Un consejero militar del presidente Hugo Chávez, el general Alberto Muller, dijo recientemente a la prensa estadunidense que su país podría vender los F-16 a otros gobiernos.

El 15 de mayo Washington decidió imponer un embargo de armas contra el país sudamericano, con el argumento de que Venezuela no colabora lo suficiente en la llamada guerra contra el terrorismo.

Para eludir las restricciones de Estados Unidos, Venezuela pactó con Rusia la venta de 30 aviones caza Su-30, de la marca Sujoi.

Según Jane's, el acuerdo entre Caracas y Moscú abarca la venta de 38 helicópteros Mi-17V-5 y artillería para rotores del modelo Mi35M.

El gobierno de Chávez, adquirió el año pasado 100 mil fusiles automáticos Kalashnikov AK-103, cuya primera partida de 30 mil piezas recibió el pasado 14 de julio.

De acuerdo con el ministro de Defensa de Venezuela, el almirante Orlando Maniglia, las naves rusas están llamadas a ser "la espina dorsal" de la aviación venezolana del siglo XXI.

Como parte de las acciones del presidente Chávez para contrarrestar el embargo estadunidense, el mandatario venezolano ha realizado este año visitas a diversos países, incluidos Rusia, Irán y China, de donde salió este domingo con dirección a Malasia.

Tras haber obtenido el apoyo de Pekín para que Caracas ocupe un escaño en el Consejo de Seguridad, como miembro no permanente, Chávez inicia este lunes una visita de cuatro días en Kuala Lumpur, centrada en la crisis de Medio Oriente y en promover la cooperación en el sector de la energía.

Malasia no reconoce a Israel y Venezuela llamó de regreso a su encargado de negocios en territorio israelí en agosto, después que Chávez afirmó que Israel había "perdido la cabeza".

Durante la visita que realizó a China en los últimos días, Chávez definió la ofensiva israelí en Líbano un "genocidio", comparándola con los crímenes cometidos por los nazis alemanes en la Segunda Guerra Mundial.

A su llegada a la capital malaya, el mandatario dijo que el gobierno de Malasia envió una nota diplomática en la que dio su respaldo a los planes venezolanos de llegar al Consejo de Seguridad. Rusia también ha comprometido su voto en favor de la misión venezolana.

Las relaciones comerciales entre Venezuela y Malasia ascendieron en 2005 a 39 millones de dólares, cifra que representa un incremento de ciento por ciento respecto de los 19.8 millones de dólares registrados en 2004.

Posible visita a Siria

Chávez proseguirá su gira en Angola y -según expresó el viernes pasado- tiene la intención de viajar a Siria antes de volver a su país, donde la semana pasada un incidente diplomático incrementó las tensiones con Washington.

Autoridades venezolanas detectaron un contrabando de mechas y detonadores que la embajada de Estados Unidos en Caracas intentó meter al país de manera ilegal.

Las autoridades información del hallazgo el 23 de agosto. El cargamento de material para la activación de explosivos estaba escondido en los bultos de un diplomático estadunidense que fueron enviados vía aérea.

La carga desviada incluye, supuestamente, cohetes propulsores del sistema de los aviones Bronco, que antes del embargo militar fueron solicitados por Caracas, pero que no fueron entregados al oficial responsable de las fuerzas armadas venezolanas.

Un asesor militar de Chávez, el almirante Luis Cabrera Aguirre, alertó sobre la posibilidad de que los pertrechos pudieran ser desviados a grupos opositores que buscan la desestabilización política en Venezuela.