Advierte el CEESP sobre el riesgo de ''choques económicos'' y aumento de impuestos
La elevada deuda interna puede ser nociva para la estabilidad y el desarrollo
El saldo total del endeudamiento del sector público supera $3 billones 307 mil millones
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El CEESP advierte que hay poca oportunidad de maniobra para reducir la deuda interna, porque no existen ingresos adicionales que permitan un superávit en las finanzas públicas
Foto: Reuters
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) se unió a las voces que han alertado sobre los riesgos de mantener una deuda interna elevada, al considerar que puede ser ''nocivo'' para la estabilidad y desarrollo económico de México y generar ''choques económicos; pero sobre todo a que deberá pagarse en un momento dado por la sociedad, vía mayor pago de impuestos''.
Según el organismo empresarial, el saldo de la deuda interna presupuestaria sumó un billón 33 mil 524 millones de pesos al segundo trimestre del año, pero si se agrega la llamada deuda contingente que ascendió a un billón 140 mil 232 millones de pesos y ''que en términos de débito interno representa el rescate carretero, IPAB, Pidiregas y la banca de desarrollo, (...) el saldo de la deuda neta total del sector público alcanza un valor de 3 billones 307 mil 627 millones de pesos''.
La citada cantidad es equivalente a 36.6 por ciento del producto interno bruto (PIB) y superior en 42.7 por ciento a la deuda registrada al principio de sexenio del presidente Vicente Fox, que era de 2 billones 318 mil 200 millones de pesos.
Sólo por el pago de intereses se utilizan recursos que podrían ser destinados a proyectos con mayor impacto social y económico, afirma y añade que ''el gasto en educación pública durante los primeros seis meses del año es menor en 14 mil 77 millones de pesos que los intereses pagados por deuda interna en el mismo periodo, y en salud resultan en 61 mil 126 pesos menos''.
Esfuerzo insuficiente
Para el organismo empresarial ''el mayor inconveniente del incremento de la deuda del sector público se refiere al hecho de que gran parte de los ingresos, incluyendo los relacionados con la deuda, no se han utilizado para inversiones productivas''. De esta forma, se provoca un daño en el sistema financiero debido a que al otorgar más créditos al sector público, los bancos disminuyen la liquidez y los préstamos para el sector privado, como ha advertido el Fondo Monetario Internacional.
Si bien el CEESP reconoció el esfuerzo que han hecho las autoridades para reducir la dependencia financiera con el exterior, sentenció que no es suficiente porque en búsqueda de nuevas fuentes de financiamiento para solventar los gastos del país se ha recurrido con mayor frecuencia al crédito interno a través de los instrumentos emitidos por el gobierno como los Cetes, Bondes, Tesobonos, Ajustabonos y Udibonos.
El organismo empresarial apuntó que existe ''poca oportunidad de maniobra'' para reducir la deuda interna, debido a que no se cuenta con ingresos adicionales que generen un superávit en las finanzas públicas, aunque ponderó que en comparación con décadas anteriores, los gobiernos más recientes han contraído tasas de endeudamiento reducido, pero heredaron requerimientos financieros derivados de los pasivos existentes.
Además apuntó que ''emerge un conflicto de orden moral en relación con la justicia intergeneracional, pues la generaciones futuras heredan las deudas convenidas en la actualidad''.