El gobernador de Veracruz, irritado; proponía realizar asamblea electiva y deliberativa

Aprueba el tricolor nuevo interinato de Palacios Alcocer al frente del partido

Según el líder, el objetivo es que la directiva "transite toda la etapa de incertidumbre"

CIRO PEREZ SILVA

Sin claridad en las razones que lo llevaron a "la más terrible de las derrotas" y con una marcada división entre quienes desean un acuerdo inmediato con un eventual gobierno panista y los que rechazan esa opción, los priístas votaron ayer un nuevo interinato de Mariano Palacios Alcocer y Rosario Green en la dirigencia nacional del tricolor, que podría extenderse hasta el 4 de marzo.

Como uno de los principales damnificados por esa decisión, que tomó por mayoría el Consejo Político Nacional (CPN) del PRI, quedó el todavía coordinador de los senadores y aspirante a la dirigencia nacional de su partido, Enrique Jackson, quien en pocos días dejará dicho cargo y perderá con ello el escaparate mediático que le concede el puesto, además del fuero constitucional, pues fracasó en el intento por que Palacios Alcocer y Green Macías fueran relevados de inmediato, tras el fracaso electoral del 2 de julio pasado.

Francamente molesto, el gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, manifestó su inconformidad con el nuevo interinato, y estableció al abandonar el auditorio Plutarco Elías Calles, en la sede nacional priísta, que su propuesta era convocar a una asamblea electiva y deliberativa, en la que se discutieran el programa y el relevo de la dirigencia al mismo tiempo.

"Lo que se votó fue una (asamblea) extraordinaria para decidir primero el programa, la ruta ideológica, y de ahí sacar una propuesta para hacer la elección. La experiencia del 2 de julio es muy dolorosa y no podemos andar los mismos pasos que nos condujeron a ese día. Ahora tenemos que hacer, como dijo algún consejero, un ejercicio diferente, porque el domingo hay elecciones en Chiapas. Luego, un mes después, en Tabasco. Nosotros vamos a tener elecciones en Veracruz. Por eso queremos deliberar el programa y elegir a la dirigencia antes del 4 de marzo. ¿Por qué queremos eso? Porque uno de los capítulos dolorosos, la desunión, fue que parte del partido acusaba a nuestro candidato (Roberto Madrazo), quien desde la presidencia del partido construyó la candidatura (presidencial)", aseveró Herrera Beltrán.

La resolución asumida ayer y el propósito de ésta fue, explica Mariano Palacios, "que se transite toda la etapa de incertidumbre que vive el país como producto de la calificación de la elección presidencial, la integración del Congreso de la Unión, la elección de las mesas de estudio y dictamen de las cámaras del Congreso, los temas relacionados con el cambio del gobierno, los tópicos vinculados con las elecciones de Chiapas y Tabasco, el inicio de la selección de candidatos en Yucatán y, en su momento, en Baja California, con la convocatoria a una asamblea nacional, y también con el proceso de sucesión de la dirigencia por quien habrá de ocupar la presidencia y la secretaría general por cuatro años.

La "fecha límite"

"Eso se hará en una fecha límite, que es el 4 de marzo de 2007, y nosotros, hoy, cuando hemos aprobado la modificación del artículo 21, hablamos de 180 días a partir de que concluya el mandato para el que fuimos electos en febrero, que está condicionado a la calificación de la elección Presidencial. Por tanto, el nuevo interinato lo iniciaremos, temporalmente, cuando concluya la calificación de la elección presidencial, en los próximos días o semanas, y no podrá prolongarse hasta después del 4 de marzo."

La idea, agrega, es que en esa fecha tome posesión de su encargo la nueva dirigencia nacional. Al ser interrogado sobre la propuesta de realizar a la brevedad una asamblea al mismo tiempo deliberativa y electiva, el dirigente tricolor apuntó: "hay algunas asignaturas pendientes que serán objeto de otro acuerdo del Consejo Político Nacional, que tiene que ver con la definición del método, los topes de campaña, la elección interna y la autorización a la Comisión de Procesos Internos para que emita la convocatoria (de elección de dirigencia).

"Quisimos ser claros y no confundir la asamblea deliberativa con la definición del proceso para seleccionar a nuestra nueva dirigencia, y eso creo que se logró muy bien. Ustedes pueden advertir el enorme acervo institucional que tiene el PRI, que mucha falta haría a otros partidos que están en la reyerta pública", dijo.