Está obligado a ofrecer máxima eficiencia en comicios cerrados: Lourdes López
Pudo haber errores en las actas, pero el IFE cumplió la ley: consejera
El instituto realiza una valoración para detectar dónde no se cumplieron los estándares
Cuando los resultados electorales son muy estrechos, el Instituto Federal Electoral (IFE) está obligado a ofrecer un máximo de eficiencia, pero ésta no puede ser medida sólo a partir de la cantidad de recursos interpuestos por los partidos o coaliciones, señaló la consejera electoral Lourdes López. Si bien aseveró que en el llenado de actas de la jornada electoral pudieron ocurrir errores, "hay responsabilidades compartidas, además de que no podemos emitir juicios hasta después de que se resuelva el proceso en su totalidad".
Consideró que los cuestionamientos que han recibido después del proceso son inherentes a la función pública, "pero no son exclusivos de este proceso electoral". Agregó que el IFE ya realiza una valoración interna de todas las áreas para detectar dónde no se cumplieron los estándares de desempeño.
Durante su participación en el seminario sobre servicio profesional de carrera, organizado por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, campus ciudad de México, Lourdes López dio a conocer que en el Servicio Profesional Electoral (SPE), 3.8 por ciento del personal tiene de 24 a 29 años; 49.30 de 30 a 44; 33.13 de 45 a 54, y 13.72 por ciento más de 55. Inclusive trabaja uno de 81 años en el IFE de Oaxaca. De ellos, mil 705 (74.5 por ciento) tiene experiencia de uno a dos procesos electorales.
Mencionó que 30 por ciento del personal de dicho servicio cuenta con más de 12 años de labores, lo que supone, entre los desafíos institucionales, buscar opciones para promocionarlos con el propósito de evitar el anquilosamiento de la estructura. "Se trata de buscar entre el personal del IFE no una permanencia cómoda, sino comprometida, pues hay una burocracia privilegiada que cuando nos va bien tiene el reconocimiento público o lo contrario".
El instituto cumplió
Por otro lado, indicó otros retos del Servicio Profesional Electoral, entre los cuales destacó el hecho de que uno de los rubros centrales en los procesos actuales, como la fiscalización, no involucra a este sector, sino a personal de confianza.
Al concluir su participación, López se refirió en entrevista a las descalificaciones que ha recibido el IFE por su desempeño: "la única lectura que podemos dar es que todavía estamos dentro de la cuarta fase del proceso, que corresponde a la validación de los resultados de la elección. Esta calificación compete sólo al tribunal electoral y el procedimiento aún está abierto, por lo que no podemos hacer ningún pronunciamiento".
-¿Siente que el IFE cumplió?
-No es un sentimiento, es una convicción. En el IFE se tienen 15 años trabajando para ofrecer resultados que tengan plena validez legal, no solamente certeza jurídica. Hay la convicción de que se hizo todo conforme a la ley.
López destacó que en las evaluaciones que se realizan del personal del SPE, el promedio alcanzado es de 92 por ciento, "aunque quizá no sea tan apegado, pero tampoco hay promedios de seis o siete. Hay fallas y prácticas que pueden ser perfectibles".
Manifestó que para la institucionalidad no es saludable que en los distritos electorales se mantenga el mismo personal más de dos procesos, porque esto puede producir cierto anquilosamiento, así como prácticas que no son necesariamente saludables para la institución.
Durante su ponencia, dijo que ante resultados apretados, el IFE debe alcanzar los máximos de eficiencia. En entrevista, indicó que la medición de los "estándares de excelencia" no está asociada a la presentación de juicios de inconformidad de los partidos, porque ésta es su potestad, sino que está vinculada a la capacidad de respuesta de la institución en cada una de las etapas del proceso hasta la jornada electoral, y esta última fue "normal, sin incidentes, donde ciertos problemas que antes se habían tenido no se repitieron".
-¿Hubo errores en las actas?
-Puede haber errores en el llenado de las actas y de distinta naturaleza. Hay responsabilidades compartidas y el IFE tiene mecanismos para medir estos resultados producto del trabajo, si bien estos resultados están sujetos a otros fenómenos, como el compromiso que podamos establecer con los ciudadanos para que ellos entiendan que tiene sentido participar en la organización de las elecciones y eso es una variable donde el instituto no tiene control.