Después de analizar videos critica falta de planeación y mando en el desalojo
La PFP tuvo conductas ilegales y abusó de la fuerza en San Lázaro: experto
Debe aplicarse sanción administrativa o penal a los responsables, dice Ernesto Mendieta
Ampliar la imagen Agentes de la Policía Federal Preventiva, apoyados con tanquetas antimotines, además de personal del Ejército y del Estado Mayor Presidencial, reforzaron la seguridad en las inmediaciones del Palacio Legislativo de San Lázaro, cuando aún faltan 15 días para que el presidente Vicente Fox Quesada presente su último Informe de gobierno Foto: José Carlo González
Falta de planeación y capacitación, conductas ilegales, uso desproporcionado de la fuerza, falta de mando operativo que regulara las acciones y ausencia de sensibilidad política para resolver las protestas mediante medidas no punitivas, son los rasgos que definieron la actuación de la Policía Federal Preventiva (PFP) contra los manifestantes que se encontraban en las inmediaciones del Palacio Legislativo en San Lázaro, de acuerdo con un análisis de Ernesto Mendieta Jiménez, maestro y doctor en seguridad pública, quien ha ocupado diversos cargos en instituciones federales y locales en la materia.
Después de analizar las imágenes captadas por una videocámara de la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Distrito Federal en el lugar de los hechos, el especialista advirtió que el riesgo de que los policías federales actúen de esta manera es que se rebase el estado de derecho, toda vez que determinados grupos podrían considerar que no hay institución capaz de llegar a una solución y controlar el conflicto.
"Este tipo de intervención sólo genera una actitud de revancha y enfrentamiento en los grupos que se sientan agredidos, lo que propicia la violencia en lugar de la conciliación, como debe suceder en una democracia", aseguró.
El gobierno debe dejar claro que no es su intención reprimir
En entrevista con La Jornada, Mendieta, quien fue director general del Instituto de la Policía Judicial Federal y coordinador del Ministerio Público de la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada de la Procuraduría General de la República (PGR), consideró que lo ocurrido el lunes debe ser sujeto a una sanción administrativa y, en su caso, ministerial, para enviar el mensaje de que la intención del gobierno no es reprimir, sino aportar al respeto de las instituciones y la existencia de un sistema de seguridad pública que se rige por las leyes.
Mendieta Jiménez aseguró que la policía no debe ser usada para enfrentamientos de este tipo, ya que los asuntos políticos y civiles deben resolverse por esas mismas vías y no mediante el uso de la fuerza policiaca.
Agregó que, como señalan las leyes internacionales consensuadas por la Organización de las Naciones Unidas y firmadas por México, el uso de la fuerza policial contra los ciudadanos, principalmente en manifestaciones lícitas, debe aplicarse sólo en casos estrictamente indispensables.
El especialista, quien también se desempeñó como fiscal antisecuestros de la PGR, destacó que los videos muestran que ninguno de los manifestantes -que se reúnen frente a una grúa que pretende llevarse una de las unidades donde se trasportaban- estaba armado con algún proyectil, utensilio o equipo propio para agredir o defenderse. Detalló que cuando los diputados intentaron subirse al brazo de la grúa, un elemento vestido de negro (del Estado Mayor Presidencial) intenta bajarlo, pero no lo logra. Posteriormente, un agente de la PFP lo intenta de nuevo y utiliza la culata de un rifle para golpearlo, cuando esta acción resultaba excesiva y peligrosa, ya que el arma pudo haberse disparado.
"En el momento de llevar a cabo la operación para moverlos (a los manifestantes) se aprecia falta de técnica de la PFP y de personas vestidas con overol negro, que actúan al lado y con la policía, que golpean a las personas, sin tener técnica, ni legalmente la necesidad de hacerlo".
En otra escena, explicó, otro elemento de negro reta a los manifestantes a que intenten subir otra vez a la grúa, con actitud de pelea, "haciendo que continúe la actitud beligerante y resistente, cuando debió ser lo contrario para que depusieran su actitud. ¿Dónde estuvo el mando de campo en la acción para controlar esas actitudes?", se preguntó. Detalló que la barrera que pretendieron formar los agentes de la PFP fue rebasada fácilmente, debido a su falta de preparación y técnica, lo que derivó en que resultaran personas lesionadas.
"La PFP es francamente incapaz, carente de toda técnica e inclusive podría ser considerada ilegal", aseguró.
Mendieta explicó que la policía debió comportarse como representante del gobierno, con una posición de negociación, para que las personas depusieran su actitud y, en caso de intervención, haciendo uso proporcional de la fuerza.