Rechazados del IPN y UNAM anuncian movilizaciones
El movimiento de estudiantes no aceptados del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) iniciará una jornada de movilizaciones en demanda de un incremento en la matrícula escolar de ambas instituciones, con el propósito de garantizar el ingreso de todos los aspirantes a la educación media y superior.
Reunidos en la unidad Zacatenco del IPN, padres de familia y aspirantes acudieron a la dirección general de esa casa de estudios para presentar el pliego petitorio, en tanto un grupo de activista se trasladó a la rectoría general de la UNAM para entregar de forma "simultánea" sus demandas y emplazar a las autoridades a ofrecer una respuesta para el próximo jueves.
En la segunda asamblea convocada por integrantes del Comité Estudiantil en Defensa de la Educación Pública y del Comité de Lucha Estudiantil del Politécnico, se acordó iniciar una semana de movilizaciones de no obtener una respuesta satisfactoria a sus peticiones, por lo que se confirmó una marcha para el próximo 15 de agosto para exigir más espacios educativos en todas las universidades públicas del país.
Nahúm Pérez, integrante del movimiento, aseguró que los siete puntos que incluye el pliego petitorio, entre los que destacan el incremento de la matrícula universitaria, esclarecimiento de los métodos de selección y asignación de carrera, derecho a revisión de examen y eliminación del estudio socioeconómico, tienen como objetivo garantizar que todos los aspirantes a ingresar a la educación media y superior "puedan ejercer su derecho a una educación pública y gratuita".
Por ello, aseguró que de no alcanzar un acuerdo con autoridades del IPN y la UNAM para asegurar que los aspirantes rechazados ingresen "a la escuela y carrera de su preferencia, estamos dispuestos a salir a las calles y marchar por nuestros derechos".
Asimismo indicó que el movimiento también participará en las acciones de resistencia civil convocadas por la coalición Por el Bien de Todos, ya que aseguró que tolerar en Presidencia al candidato panista, Felipe Calderón, "sería aceptar que los valores de la ultraderecha se impongan sobre los derechos políticos de los ciudadanos, y sobre las bases de una educación pública y laica".