No renunciará a la tecnología nuclear, advierte Teherán
Teherán, 1º de agosto. Irán no renunciará a la tecnología nuclear ni bajo "amenazas" ni por "la fuerza", declaró hoy el presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, un día después de que el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) emplazó a Teherán a que suspenda el enriquecimiento de uranio.
"El pueblo iraní tomó su decisión. Domina la tecnología nuclear pacífica (...) y cree que el ciclo de combustible nuclear es su derecho. No se puede hablar al pueblo iraní utilizando el lenguaje de las amenazas y de la fuerza", declaró Ahmadinejad en la provincia de Jorasán Norte.
El presidente, que no comentó la resolución adoptada el lunes, afirmó que quienes pueden intimidar a Irán con el idioma de la violencia y las amenazas reconocerán su error, si no ahora, en el futuro. "Si ellos no lo entendieron, lo comprenderán pronto por experiencia amarga", añadió.
El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó, por 14 votos contra uno, una resolución que da a Irán hasta el 31 de agosto para poner fin a su programa de enriquecimiento de uranio, incluida la investigación y el desarrollo, que debe ser verificado por la Agencia Internacional de Energía Atómica, o enfrentará sanciones.
Los miembros permanentes del Consejo de Seguridad (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia y China), además de Alemania, llevaron el caso de Irán a dicha instancia por la falta de respuesta iraní al paquete de propuestas económicas y seguridad a cambio de que deje de enriquecer uranio. Teherán dijo que el 22 de agosto dará una respuesta a la oferta occidental.
El presidente del Parlamento iraní, Gholam Ali Hadad Adel, criticó al Consejo de Seguridad por su decisión, y aseguró que esa resolución no tiene valor a ojos de los pueblos del mundo si se toma en cuenta que dicha instancia "no se atreve a condenar la masacre de Cana (al sur de Líbano) y se contenta con deplorarla".
A su vez, el embajador iraní ante la ONU, Javad Zarif, acusó a Estados Unidos y a sus aliados europeos de "imponer una resolución destructiva e injustificada". Añadió que esta manera de ver las cosas no llevará a un resultado productivo, y que no puede más que exacerbar la situación.
Teherán niega acusaciones de Occidente de que desarrolla combustible para ojivas nucleares, e insiste en que sus científicos atómicos sólo trabajan en la producción de electricidad con fines pacíficos.
Funcionarios iraníes han dicho que las sanciones dañarán más a Occidente que a su país al elevar los precios del petróleo a niveles incontrolables, pero analistas creen que Irán será vulnerable a sanciones de componentes industriales, importaciones de gasolina y financiamiento europeo.