En 1988 sí se podía hablar de fraude electoral, porque no había IFE: César Nava
Irrita a Acción Nacional el homenaje al ex candidato
Al blanquiazul le molestó el homenaje que perredistas hicieron al extinto Manuel J. Clouthier, Maquío, y calificó de ridículo que pretendan comparar la lucha democrática de uno de los próceres del panismo con la que ahora libra Andrés Manuel López Obrador.
César Nava, secretario general adjunto panista, señaló que la estatura moral de Clouthier, Luis H. Alvarez, de Francisco Barrio y muchos otros líderes panistas que en los pasados años ochenta encabezaron acciones de resistencia civil -similares a las actuales del PRD- están por encima de la "pequeñez" de quienes se dicen demócratas.
En contrapartida a los perredistas, dijo que el PAN desagraviará a una de sus figuras insignes cambiando a México "sin odio y sin violencia; ése es el mejor homenaje que le podemos hacer a Maquío".
En 1988 el PAN postuló a Clouthier como candidato a la Presidencia de la República y luego de los resultados electorales emprendió un ayuno del 15 al 22 de diciembre en protesta por los fraudes orquestados en Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí y Zacatecas. En febrero de 1989 fue nombrado coordinador del llamado gabinete alternativo. En octubre de ese año murió en un accidente automovilístico.
A decir de Nava, el homenaje del PRD es tardío, aunque consideró que Maquío es un personaje universal que va más allá de partidos o de ideologías y por eso no pretenden que sea patrimonio exclusivo del PAN.
"Lo que señalamos en todo caso es la doble cara del señor López Obrador, quien tiene alojados en su primer círculo a personajes como Arturo Núñez, Manuel Camacho Solís y Manuel Bartlett, cuya responsabilidad histórica por el fraude de 1988 jamás prescribirá."
Para los panistas, este homenaje al pie de la estatua de Clouthier es una "mascarada, un nuevo intento de engaño, pero la historia del PAN, más de 67 años de lucha democrática, nunca será sustento de movimientos seudodemocráticos, como el que encabeza el señor López Obrador".
La diferencia, según este dirigente panista, es que en 1988 sí se podía hablar de un fraude, porque no había un IFE ciudadano, sino un órgano electoral que era apéndice de Gobernación, ni un tribunal autónomo, sino un colegio electoral conformado por la mayoría mecánica del PRI.