Ileso, el alcalde de Sao Sebastián, tras atentado
Se fugan entre 40 y 50 reos de cárcel en Sao Paulo; arrestan a líder pandillero
Sao Paulo, 17 de julio. Por lo menos entre 40 y 50 presos se fugaron este domingo de una cárcel de Iguacu do Tieté, en el estado brasileño de Sao Paulo, lo que generó pánico entre la población, mientras la policía capturó al líder interino del grupo Primer Comando de la Capital (PCC), Anco Marcio Pereira Maia, alias El Gordo.
Los internos se escaparon al cortar las rejas de una de las celdas e hirieron al carcelero Cosme dos Santos de un tiro en la pierna, quien fue llevado a un hospital.
Uno de los reos, quien fue identificado como Giovandro, fue encontrado muerto dentro de una de las celdas. De inmediato las autoridades pusieron en marcha un operativo a cargo del Grupo de Operaciones Especiales que movilizó a la policía civil la cual patrulla las calles y helicópteros que sobrevuelan la pequeña ciudad de apenas 26 mil habitantes, y se logró la captura de 17 de los fugitivos.
La población fue avisada para permanecer en sus hogares y comunicarse con la policía en caso de notar cualquier movimiento extraño en sus calles.
Esta no es la primera vez que la ciudad enfrenta una fuga de presos. En octubre del año pasado 37 reos huyeron de la misma prisión, que tiene capacidad para albergar 48 hombres pero acoge a 71.
Por su parte, el alcalde de Sao Sebastián, en Sao Paulo, Juan García, sufrió un atentado la madrugada de este domingo, cuando volvía de una fiesta con su esposa y sus tres hijos.
Un hombre encapuchado apareció detrás de un matorral en las proximidades de su residencia y le disparó en ocho ocasiones sin que fuera alcanzado.
En tanto, Marcio Pereira, de 28 años, fue arrestado hoy por la policía de Sao Paulo.
Pererira Maia tenía orden de prisión decretada por la justicia, acusado de participar en el intento de asesinato de agentes carcelarios en San Bernardo do Campo, quienes viajaban en un autobús, el pasado 26 de junio.
El PCC es responsable de la ola de violencia contra autobuses, bancos, comercios y edificios públicos que azota a Sao Paulo desde el pasado miércoles.