"La justicia, igual que nuestros familiares, está secuestrada"
La Femospp "no fracasó; no sirvió para nada": Rosario Ibarra
El auto de libertad en favor del ex presidente Luis Echeverría Alvarez, después de que un juez federal declaró que el delito de genocidio del que se le acusaba prescribió, es un ejemplo de que en nuestro país continúa la impunidad, la simulación y la corrupción, señaló la presidenta del Comité Eureka, Rosario Ibarra de Piedra.
La luchadora social aseveró que el escenario montado para castigar a Echeverría por los sucesos del 2 de octubre de 1968 "es una grosería del gobierno de Vicente Fox; le quiere limpiar el camino a Felipe Calderón, porque cree que va a ser el presidente".
Aseguró que la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp) no fracasó en su intento por juzgar al ex mandatario, sino que "no sirvió para nada". Indicó que el titular de esa dependencia, Ignacio Carrillo Prieto, "se prestó al trabajo sucio fraguado por Fox, y le tocó jugar el papel del malo de la película".
Sin embargo, consideró que aunque el ex presidente no será juzgado por los hechos del 2 de octubre de 1968, "le quedan infinidad de casos, desapariciones y crímenes" para que la justicia lo considere culpable en vida. "Aún hay mucho; no lo van a poder limpiar, le van a faltar años para todas la denuncias que hay en su contra".
Ibarra de Piedra comentó que la decisión del juez decimoquinto de distrito en materia de procesos penales judiciales, Ranulfo Castillo Mendoza, confirma que en México la justicia, "al igual que nuestros familiares, está secuestrada y desaparecida"; inclusive, mencionó que no se ha procurado justicia para víctimas de hechos recientes, como los de la Siderúrgica Lázaro Cárdenas-Las Truchas (Sicartsa) y Atenco.
En tanto, Jesús Martín del Campo, integrante del Comité 68, aseveró que la exoneración demuestra la deuda del gobierno foxista con la justicia, por lo que "lo único que nos queda es el plano internacional".
Manifestó que la decisión de José Angel Mattar Oliva, titular del segundo tribunal unitario, al ordenar arresto domiciliario del ex presidente por considerar que existían elementos en su contra para iniciar proceso judicial, dada a conocer a finales de junio, fue un "golpe publicitario para crear una cortina de humo, porque el gobierno no tiene el deseo de ir a fondo en las investigaciones de ese delito".
Martín del Campo refirió, que contrario a sus principios, el Poder Judicial no es autónomo, sino leal con quienes tuvieron el poder en el pasado. A pesar de ello, destacó que Echeverría es culpable de los hechos que se le imputan, y que la decisión del juez no lo exculpa, "ya que sólo argumentó que el delito ha prescrito, pero los documentos y testimonios que existen en su contra son condenatorios y nunca los ha podido refutar nadie".