El triunfador tendrá sólo un tercio de votos y carecerá de mayoría en el Congreso
Ante la elección cerrada, académicos proponen crear un gobierno de unidad
Diego Valadez: el TEPJF tiene la última palabra, y ahí los resultados pueden cambiar
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Jóvenes de la UNAM protestan frente a la sede del IFE contra lo que consideran un "fraude electoral"
Foto: Jesús Villaseca
Diego Valadés, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indicó que al margen de las inconformidades por los resultados de la jornada electoral, la calificación de los comicios estará en manos del Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), y cabe la posibilidad de que el resultado sea distinto a los cómputos oficiales difundidos desde el do-mingo pasado.
El académico recordó que el TEPJF tendrá como plazo para anunciar el resultado final el 6 de septiembre.
Como integrante del denominado Cuarto por la Paz -grupo conformado la noche del domingo por intelectuales, académicos y otras personalidades preocupadas por que se respete el resultado de las elecciones-, reiteró el llamado a la reconciliación y la cohesión social "para evitar cualquier fractura que ponga en riesgo la convivencia entre los mexicanos".
Por su parte, Miguel León-Portilla, historiador e investigador emérito de la UNAM, calificó de "inédita" la incertidumbre en los resultados del proceso electoral, y aseguró que el candidato ganador "deberá apegarse a la justicia y al derecho para que pueda ser reconocido por los ciudadanos.
"Si bien es satisfactorio que los mexicanos tomen en serio los procesos electorales, como lo demuestra su participación en una de las votaciones más copiosas en la historia de México, también indica que somos un país con tendencias plurales, y pese al riesgo de polarización política, así se opera la democracia."
Luego de participar en la inauguración de la catédra La UNAM ante el exilio español: a 70 años del inicio de la Guerra Civil Española (1936-2006), León-Portilla insistió en que el candidato triunfador "deberá buscar la concordia, el diálogo y tener presente que los partidos políticos deben privilegiar, por encima de todo, el bien de México".
El director de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, Ambrosio Velasco, aseguró que la incertidumbre en los resultados electorales no debe verse como una crisis, "sino como voluntad de una sociedad plural, en la que debe imperar el respeto al estado de derecho".
Advirtió que sería un "grave error" que el ganador trate de imponer su modelo de gobierno "sin considerar al resto de expresiones políticas que también alcanzaron altos niveles de participación".
Por separado, Roberto Gutiérrez, politólogo e integrante del grupo de expertos en procesos políticos de la Universidad Autónoma Metropolitana, aseguró que sin un presidente electo y con resultados electorales inciertos, los actores políticos y las instituciones públicas deben privilegiar el clima de madurez y serenidad.
"Enfrentamos un escenario complejo, no sólo para conocer quién será el ganador de la contienda presidencial, sino para construir un gobierno de unidad, pues quien resulte triunfador habrá obtenido sólo un tercio de los votos y no tendrá mayoría en ninguna cámara."
Gutiérrez reconoció que la elección sería "cerrada", aunque ninguna encuesta anterior "logró prever una diferencia de votos tan reducida. Más que una ideología o identificación con la plataforma de un partido, triunfó el voto del miedo y prevalecerá la creciente distancia que mantiene la clase política de los verdaderos intereses de la sociedad".