Inauguran exposición con obra de 10 creadores en una galería de la colonia Roma
Colectiva de paraguas ''desollados, intervenidos y vilipendiados''
Marisa Lara, Arturo Guerrero y Pedro Friedeberg, entre otros, presentan pintura, dibujo, arte objeto e instalación
La muestra, un paro en medio del Mundial y la política: Ana María Pecanins
Ampliar la imagen Ana María y Tere Pecanins ayer, en su galería, durante su intervención en Lluvia de piedras, 2006, instalación de Héctor de Anda incluida en la colectiva Paragüería, que hoy se abre en el recinto de avenida Durango 186, colonia Roma Foto: María Luisa Severiano
El paraguas, como todo mundo sabe, sirve para protegerse de la lluvia. Pero cuando las gotas de agua son sustituidas por rocas, por ejemplo, entonces hace alusión a otro tipo de agresiones, como bien expresa la instalación Lluvia de piedras, de Héctor de Anda.
Esa obra forma parte de Paragüería, exposición de pintura, dibujo, arte objeto e instalación, que hoy se inaugura a las 19:30 horas en la Galería Pecanins, en Durango 186, colonia Roma.
A propósito de la muestra, el crítico Luis Carlos Emerich escribió que ''el paraguas es parabólico, paradójico, parafrástico y, por tanto, exclusivo para güeros y poetas. Contra lo que se cree, el paraguas no fue inventado por los chinos ni por Gene Kelly ni por Mary Poppins ni por Catherine Deneuve. En realidad su creador fue René Magritte, porque antes de Las vacaciones de Hegel las señoras sólo lo usaban plegado para golpear a los atrevidos. Pero una verdad universalmente aceptada es que el paraguas es tan proclive al vuelo como al extravío".
Trabajos con toda libertad
De acuerdo con Ana María Pecanins la idea de la exposición fue de su gemela Tere. A las hermanas -recién condecoradas con la Orden de la Cruz de Isabel la Católica- siempre les ha gustado armar muestras en las que los artistas son motivados a trabajar un tema con toda libertad.
Esta vez no fue la excepción. De allí que el diseñador Jeff Pavelka le quitó la tela a su paraguas para convertir su armazón metálico en una araña que trepa la pared, en homenaje a la escultura monumental de Louise Bourgeois incluida en la exposición de la artista estadunidense que se exhibió en los museos Tamayo y Arte Contemporáneo de Monterrey.
Una decena de artistas fueron invitados. Emerich acota que ''los paraguas intervenidos, desollados, humanizados, sorprendidos, enriquecidos, empobrecidos, elogiados o vilipendiados por 10 artistas, no son demostraciones de la utilidad del Viagra, sino de la imaginación para probar sus nuevas e inopinadas funciones. No son objetos encontrados y resignificados, sino partes de un paisaje después de una lluvia de ideas".
La rudeza de la obra de De Anda, en la que la lluvia de piedras rodea al indefenso paraguas, se contrasta con la delicadeza de la pieza de Yani Pecanins, Lluvia interior, pequeña sombrilla de la que cuelgan minúsculos objetos.
Marisa Lara y Arturo Guerrero trabajaron tres paraguas, uno a manera de móvil; otro colgado sin abrir, usa parejas de muñecos alusivos a su costumbre de trabajar al alimón y su condición de ''siameses", mientras en la tela del último pintaron un par de botas sobre un fondo de pequeñas líneas dibujadas que, vistas de cerca, forman mapas.
Aparte de trabajar el objeto en cuestión, Pedro Friedeberg también hizo un Alfabeto paragüístico, pintura mixta que vincula cada letra con un paraguas diferente.
Rogelio Cuéllar realizó un estudio fotográfico en la avenida Durango, de los expositores y las galeristas, con sus respectivos paraguas.
Había más apoyo entre artistas
Ana María Pecanins ve la exposición como un ''paro" en medio de partidos de futbol y la variopinta actividad política, que recuerda los tiempos cuando ''había más apoyo entre artistas. No éramos un clan, pero nos juntábamos por el placer de comentar cada quien lo que quería hacer o hacía. No era competitivo, sino algo amistoso. Pero todo se fue desperdigando. Ahora parece que andamos en otra ciudad. Es más difícil mantenerse vivo al respecto".