Si jugamos con el corazón quizá podremos avanzar, dijo

Suiza, que no ha recibido gol, dura prueba para el ucraniano Shevchenko

AGENCIAS

Colonia, 25 de junio. En un duelo de dos outsiders, entre el único seleccionado que no ha recibido ningún gol y otro que tiene uno de los mejores delanteros del mundo, Suiza y Ucrania jugarán este lunes un atractivo encuentro de octavos de final de la Copa del Mundo.

En su primera aparición en estas lides deportivas los ucranianos intentarán demostrar que tienen más para ofrecer que el jugador del año en Europa 2004, Andriy Shevchenko, además de haberse recuperado de la goleada 4-0 que le propinó la España en su debut.

"Todos los equipos de octavos de final son fuertes", pero "si jugamos con el corazón y con nuestros seguidores apoyándonos quizá podamos seguir avanzando", dijo Sheva.

Con apenas 48 horas de descanso Ucrania enfrentará también algunos problemas con sus hombres claves al no poder alinear ante los helvéticos a Vyaschelav Svidersky y Andry Rusol, ambos suspendidos, además de que Dmitro Chigrinsky, uno de los posibles remplazantes, fue descartado por lesión en un muslo que lo marginará el resto del campeonato.

El cuadro suizo, a su vez, es el único que pudo concluir la fase de grupos sin goles en contra y será sin duda una difícil prueba para Shevchenko, aunque ambos combinados tienen problemas defensivos para resolver con miras al duelo de Colonia.

Los helvéticos recibieron apenas el sábado un fuerte golpe emocional cuando el zaguero Philippe Senderos sufrió la dislocación de un hombro, por lo que no podrá jugar por lo menos dos semanas y seguramente será sustituido por Johan Djorou, de 19 años.

"¡Hay que ganar por él!", dijo de inmediato Johan al saber que podría ocupar el lugar de Senderos. "Es un compañero de equipo, pero también un gran amigo. Emociona mucho sustituir a un colega lesionado. Tendremos un recuerdo para él", agregó.

El ganador de Suiza-Ucrania jugará en cuartos de final el próximo viernes en Hamburgo contra el vencedor del duelo que disputarán este lunes, en Kaiserslautern, Italia y Australia, partido en el que son amplios favoritos los azzurri, aunque no se descarta que los de Oceanía vuelvan a sorprender.