Nula respuesta de autoridades federales y estatales: ejidatarios
El conflicto agrario Fox-campesinos, a organizaciones internacionales
San Francisco del Rincón, Gto., 18 de junio. Unos 70 ejidatarios de la comunidad San Cristóbal de este municipio se manifestaron sobre la carretera León-Cuerámaro, a unos metros de la entrada a la localidad, en demanda de que termine el conflicto agrario que mantienen con la familia del presidente Vicente Fox desde hace 69 años.
Los campesinos, quienes protestaron durante unas siete horas sin interrumpir el tráfico en la citada arteria, reclaman 900 hectáreas y la presa de San Cristóbal, convertida en lago artificial en la casa de descanso del mandatario.
El ejidatario José Guadalupe Cruz Pacheco señaló que ante la falta de respuesta de autoridades federales y estatales, pedirán ayuda a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y a otros organismos internacionales para que las tierras sean devueltas en beneficio del poblado.
"Nos paramos aquí para que Vicente Fox vea que tiene un pendiente que no ha cumplido desde 1937, y que está desacatando una resolución presidencial, la cual ordenó que se regresen tierras al ejido", indicó el también regidor perredista.
Aunque la familia Fox tiene la posesión legal de al menos mil 700 hectáreas, los labriegos insistieron en que "si ya las explotaron de manera irregular todos esos años, entonces deben reconocer que tienen 900 que no son suyas. Son de nuestros hijos, de nuestros sobrinos y de nuestros parientes, quienes por no tener dónde trabajar se van a Estados Unidos".
Según los inconformes, el subsecretario de la Reforma Agraria, José Gilberto Hershberger Reyes, se comprometió a que este lunes comenzarían los trabajos de revisión de los planos originales para buscar una salida al conflicto, "pero cuando le hablamos para conocer cuándo y dónde nos íbamos a ver dijo que siempre no, que no podía hacer nada".
Por la carretera León-Cuerámaro cruzó esta mañana Vicente Fox, quien junto con algunos de sus parientes se dirigió "a su otro rancho, en La Estancia, y cuando pasó por acá ni siquiera volteó a vernos. Y es por eso que ya cansados de que nos ignore el propio Presidente, pues lo que vamos a hacer es pedir ayuda a algunas instancias internacionales para que nos apoyen".
Cruz Pacheco indicó que ya se han puesto en contacto con algunos vecinos de la localidad que trabajan en Estados Unidos, para pedirles que acudan con algunas organizaciones de ese país y "les lleven los documentos que tenemos, que comprueban que el mandatario y su familia trabajan en tierras que pagó la nación y que no las quiere devolver".
En 1940 fue la primera vez que los sancristobalenses exigieron al hacendado José Luis Fox Pont acatar la resolución presidencial, pero en ese momento el Ejército y el gobierno de Guanajuato evitaron que los lugareños fueran dotados de 800 hectáreas de tierra fértil y de la presa de San Cristóbal.
En ese entonces y por la expropiación de parte de las tierras de la hacienda San Cristóbal se conformaron dos poblados: El Desagüe y San Cristóbal, pero faltaron predios por entregar.
En 1972 nuevamente se pretendió dar validez al decreto presidencial, pero las fuerzas del orden arremetieron contra los ejidatarios, dejando un saldo de dos personas muertas y varias lesionadas. "Fue entonces cuando nuestros padres ya no quisieron hacer nada y cuando la familia Fox empezó a hacerse de oídos sordos."
Sin embargo, a partir de que el mandatario anunció que regresaría al rancho San Cristóbal a descansar, luego de que termine su sexenio, los ejidatarios retomaron su reclamo.
"Nos preocupa que regrese a descansar a un lugar que sabe que no es de él, por eso tiene que devolver las tierras. Lo único que ha dejado la familia Fox en todos estos años es la división de la comunidad, pleitos entre los que no estamos conformes y otros que por no perder su trabajo hacen todo y hasta lo imposible por defenderlos", expresó Cruz Pacheco.
En caso de que las autoridades no resuelvan el conflicto, el regidor perredista anunció que los afectados realizarán un plantón indefinido y una huelga de hambre frente al rancho San Cristóbal, "topemos donde topemos, porque ya estuvo bueno".