El árbitro Marco Rodríguez, determinante al no marcar un penal contra los ingleses
Con autogol de Carlos Gamarra, Inglaterra derrotó a Paraguay
Desafortunado arranque de los sudamericanos; el arquero Villar, fuera dos semanas por lesión
Ampliar la imagen El arquero Paul Robinson sale de su marco para tapar el tiro del paraguayo Carlos Paredes Foto: Ap
Ampliar la imagen Carlos Gamarra (izquierda) cabecea el balón hacia su propia portería, para batir al portero Justo Villar, quien más tarde dejó el partido por lesión Foto: Ap
Francfort, 10 de junio. Inglaterra pretextó el clima caluroso tras su deslucido triunfo 1-0 sobre Paraguay, en partido del grupo B, con un autogol del defensa y capitán Carlos Gamarra, a los 4 minutos, una desgracia no prevista por los sudamericanos que se esmeraron sin éxito en la búsqueda del empate.
Los jugadores paraguayos se dejaron impresionar durante los primeros minutos por la parafernalia preparada por los 35 mil aficionados ingleses que coparon el graderío del World Cup de Francfort, y encandilar por el rubio conductor David Beckham, cuyo primer lanzamiento fructificó con un gol impensado.
Descontrolados, con pases imprecisos, uno de esos errores derivó en una falta innecesaria en el medio sector, desde donde disparó Beckham para que Gamarra peinara y dejara sin opción a su portero. Esa acción selló la primera conquista del equipo de La Rosa en Alemania y encendió aún más el grito de "¡Here we go, here we go!"
Los paraguayos consideraron que el árbitro mexicano Marco Antonio Rodríguez fue determinante en el resultado por hacerse de la vista gorda ante una falta en el área, un penal, cometido por Ashley Cole sobre Carlos Paredes a los 45 minutos de juego.
Al infortunado autogol de Gamarra se sumó la lesión del portero Justo Villar al minuto 8, quien realizó una desesperada salida para frustrar la entrada ofensiva de Michael Owen y sufrió una contractura en la pierna derecha, por lo que fue remplazado por Aldo Bobadilla, en el cambio más rápido de un arquero en los mundiales.
Bobadilla dio más seguridad, aunque de entrada cometió una infracción técnica que el silbante Rodríguez marcó sobre el borde del área grande. El disparo de Beckham no tuvo resultado.
Un furibundo ataque paraguayo a los 45 minutos, derivado de un centro de Roberto Acuña desde la derecha, dio la opción de anotar a Paredes, pero Cole le puso la pierna en una evidente infracción penal que no se animó a cobrar el árbitro mexicano.
En el segundo tiempo, el gigante Peter Crouch dio mucho trabajo a los zagueros Gamarra y Julio Cáceres, quienes sin embargo lograron controlarlo.
Por Paraguay, Nelson Haedo fue un guerrero solitario sin precisión en el toque final. Muy tarde, hasta el minuto 67, el técnico Aníbal Ruiz decidió ingresar a Nelson Cuevas, con lo que ganó profundidad, pero el tiempo ya no alcanzó.
Los guaraníes todavía pasaron un susto ante un magistral pase de Beckham hacia Frank Lampard que Bobadilla mandó trabajosamente a tiro de esquina.