No salieron capitales, pero las acciones cayeron 15%: Prieto
La volatilidad hizo perder $450 mil millones de capitalización a la BMV
La volatilidad que comenzó en febrero y se acentuó en los últimos tres días provocó una caída de 450 mil millones de pesos en el valor de capitalización de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), que era de 3 billones de pesos. Esto representó una depreciación de 15 por ciento en las acciones que cotizan en el mercado, pero no una salida de capitales, afirmó el presidente de la institución, Guillermo Prieto Treviño.
Dijo que la incertidumbre que prevalece por el temor a una nueva alza en las tasas de interés en Estados Unidos, impidió la colocación de tres emisoras por un monto total de 5 mil 700 millones de pesos, y subrayó que los inversionistas esperan ahora mejores condiciones para llevar a cabo sus operaciones. Se trata de las emisiones de Cablemas, del sector de telecomunicaciones; Alsea, del ramo comercio dedicada a la administración de restaurantes, y Grupo Senda, dedicado al autotransporte de pasajeros.
Advirtió que si los resultados electorales del 2 de julio no se respetan, los mercados reaccionarán de manera negativa; los inversionistas ya descontaron que será una elección muy apretada y que la diferencia de votos entre el ganador y los perdedores no será muy representativa, pero tendrá que respetarse la decisión de la ciudadanía que depositará su voto en las urnas.
En conferencia de prensa al término de la colocación de acciones del Grupo Famsa por un monto de casi 3 mil millones de pesos, Prieto Treviño afirmó que la época de las tasas de interés bajas ya terminó, y ahora se espera la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos que se reunirá a finales de junio.
En este escenario, agregó, la BMV mantiene un rendimiento de entre 7 y 8 por ciento en términos de pesos. En términos de dólares ''el mercado se encuentra tablas'', por la depreciación del peso que al cierre de 2005 tenía una cotización de 10.60 frente al dólar y ahora está en 11.30. Ha habido una depreciación del peso de aproximadamente 8 por ciento.
El dirigente del mercado bursátil, sin embargo, consideró que esta volatilidad que no es propia de México, sino que ocurre en los mercados internacionales, ''es una situación temporal, transitoria''. Ha habido un reacomodo de portafolios y no puede considerarse una crisis.
Encuestas sobre los candidatos presidenciales van y vienen; unos mejoran otros bajan, pero hasta ahora no se ha contaminado el mercado por esos resultados. No podemos negar que en la medida en que se acerque el 2 de julio habrá otros periodos de volatilidad. ''Las elecciones serán competidas y muy aguerridas, pero la diferencia de un voto dará el triunfo al que lo tenga''.
Si después del 2 de julio, precisó, empiezan las descalificaciones o hay cambios drásticos en la política económica, entonces los mercados reaccionarán de manera negativa y eso a nadie le conviene.