Relacionan al depuesto líder con el ex cerebro financiero de ese grupo
Investiga PGR supuesto nexo de Gómez Urrutia con el cártel de Juárez
Los empresarios Ancira Elizondo y Gutiérrez Muguerza, en las pesquisas
Las denuncias penales interpuestas en la Procuraduría General de la República (PGR) contra el depuesto líder minero Napoleón Gómez Urrutia, por supuestas operaciones financieras "inusuales" detectadas en cuentas del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMRM), y que implican movimientos por más de 300 millones de pesos, permitieron a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) abrir una línea de pesquisas encaminada a demostrar los presuntos vínculos del dirigente minero con el cártel de Juárez.
Según consta en documentos oficiales a los que tuvo acceso La Jornada, Ernesto Gómez Casso, hijo del líder minero, y Rodolfo Rudy Montalvo, a quien Gómez Urrutia utilizó como prestanombres, estuvieron relacionados con Eduardo Reséndez Muñoz, ex cerebro financiero de dicho grupo delictivo, quien fue asesinado en Nuevo León en marzo de 2002.
Esta hipótesis ministerial es investigada por la SIEDO, con el propósito de poder obtener órdenes de aprehensión contra el inculpado por los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada.
Las pesquisas de la PGR apuntan hacia varios frentes: Oralia Casso Valdez, esposa de Napoleón; sus hijos Ernesto y Alejandro Gómez Casso, así como varios prestanombres y algunos empresarios reconocidos en el sector económico, como es el caso de Sergio y Raúl Gutiérrez Muguerza y Alonso Ancira Elizondo, de Altos Hornos de México.
La base fundamental de la acusación, según consta en la averiguación previa UEIDFF/FINM02/64/2006, refiere que Gómez Urrutia "repartió arbitrariamente y en forma indebida cantidades entre trabajadores y ex trabajadores sin derecho a recibir esos fondos; y se apoderó, junto con otras personas del SNTMMRM, así como cómplices y familiares del líder, de una cuantiosa cantidad (35 millones de dólares), mediante depósitos a su nombre y de terceras personas, prestanombres en el extranjero y demás maniobras financieras para ocultarlos, según se ha podido averiguar".
La querella que indaga la SIEDO refiere que Rodolfo Rudy Montalvo, empresario que radica en la ciudad de McAllen, Texas, Estados Unidos, era amigo y socio del presunto narcotraficante Eduardo Reséndez. Desde hace más de dos décadas, Gómez Urrutia lo utiliza como prestanombres.
Ernesto Gómez Casso, uno de los hijos del dirigente sindical depuesto, también habría tenido vínculos de negocios con el ex cerebro financiero del cártel de Juárez.
En la indagatoria ministerial se menciona que el consanguíneo de Gómez Urrutia "está relacionado con droga y ha recibido cantidades de dinero de las cuentas del SNTMMRM, además de ser uno de sus operadores de actividades ilícitas (...) Ernesto Gómez es y ha sido inversionista y socio de personas de dudosa reputación como el señor Eduardo Reséndez, del cártel de Juárez, también se ha detectado que fondean recursos de una papelera de Reséndez (papelera Laskim) al restaurante Mirabau", propiedad del hijo del ex líder minero.
La averiguación previa refiere que la amistad entre Rudy Montalvo, Napoleón Gómez y el presunto narcotraficante Eduardo Reséndez comenzó a finales de la década de los 70, cuando este último era asesor de Javier Lobo, de la empresa Protexa, y el depuesto líder sindical lo de La Casa de Moneda.
"A partir de la muerte de Reséndez, Montalvo y el líder minero continuaron directamente su relación en la compraventa de metales preciosos sustraídos de la Casa de Moneda", puntualiza el documento de la investigación.
Los querellantes, entre ellos el actual líder sindical de los mineros Elías Morales Hernández, denunciaron que Gómez Urrutia utilizaba a familiares, amigos y empresarios como copartícipes y prestanombres para llevar a cabo actos ilícitos, entre los que señala a su esposa Oralia Casso Valdez, "quien encubre y sirve de prestanombres participando activamente en decisiones del sindicato, maneja grandes cantidades de dinero en efectivo para apoyar actividades ilegales de su marido".
También se responsabiliza a Tadeo Casso, cuñado de Napoleón, como prestanombres en la empresa Excelencia Numismática, y se menciona que en la sucursal Legaria de la Casa de Moneda, supuestamente el grupo delictivo encabezado por Gómez Urrutia traficaba con metales obtenidos de manera ilegal de esa institución.
En la investigación de la SIEDO sale a relucir el nombre de Humberto Felipe de Jesús Torres Kuri, esposo de María de Lourdes Casso.
La mención que se hace de Alejandro Gómez Casso, el otro hijo del ex líder minero, indica que trabajó en Altos Hornos de México y mantiene contacto con los empresarios Sergio y Raúl Gutiérrez Muguerza y Alonso Ancira Elizondo, quienes "sirvieron para que Napoleón estableciera acciones para fortalecer al sindicato" a costa de otras empresas.