Condiciona la eventual legalización de indocumentados
Primero seguridad y luego propuestas, advierte Garza
El Congreso de Estados Unidos no considerará seriamente ninguna propuesta legislativa que aborde el tema migratorio y una eventual aceptación de trabajadores indocumentados, a menos que se tomen nuevas medidas para hacer más segura la frontera, advirtió el embajador de ese país en México, Antonio Garza.
Dijo que la seguridad de la frontera es una ''responsabilidad compartida'' entre los dos países, y quienes viven a ambos lados tienen interés en ver que se dediquen mayores recursos y esfuerzos a ''sacar de circulación'' a los narcotraficantes y a otros criminales.
En declaraciones formuladas poco antes del mensaje que el presidente George W. Bush dirigió al pueblo estadunidense, el diplomático precisó que su país redoblará esfuerzos para que la zona fronteriza sea más segura, al aumentar la presencia de agentes de la Border Patrol y agregar equipo electrónico importante para monitorear la actividad en la región.
''Si se le llamara a participar, la Guardia Nacional podría relevar a oficiales de aduanas y protección fronteriza de algunas tareas de rutina -de índole administrativa y logística-, lo que permitiría que más agentes se concentraran en capturar a los criminales y contrabandistas que buscan hacer daño al común de ciudadanos estadunidenses y mexicanos'', dijo.
El embajador Garza subrayó que Estados Unidos tiene el derecho, como nación soberana, de hacer que la zona fronteriza sea más segura. El presidente Bush, agregó, es el comandante en jefe del país, y sus responsabilidades incluyen garantizar la seguridad del pueblo estadunidense. ''Varios millones de personas están viviendo y trabajando en Estados Unidos en violación de nuestras leyes migratorias y, desde mi punto de vista, nuestro Congreso no va a considerar seriamente cualquier propuesta legislativa que aborde el tema de su presencia en nuestra nación, a menos que podamos hacer nuestras fronteras más seguras.''
Señaló que el respeto a la ley es de gran importancia para el pueblo estadunidense. ''Somos un país de gran tradición migratoria y que acoge a los inmigrantes; seguiremos dando la bienvenida a quienes ingresen a nuestro país cumpliendo nuestras leyes'', dijo el diplomático, quien confió en que ''los dos gobiernos seguirán trabajando juntos para controlar la frontera y encontrar maneras de colaborar en nuestros esfuerzos por la seguridad de la región''.
Inclusive recordó que los presidentes George W. Bush y Vicente Fox hablaron vía telefónica el pasado domingo, y en esa conversación el mandatario estadunidense aseguró a su homólogo mexicano que Estados Unidos no militarizará la frontera común. ''Ambos presidentes han mostrado gran liderazgo en sus compromisos de mantener segura nuestra frontera y garantizar el flujo libre y legal.''