Una bomba a punto de estallar en el calcio, dice la prensa
Renunció en pleno el consejo de administración del Juventus
El vicepresidente de la federación también dimitió
Un árbitro mundialista, amenazado por el escándalo
Roma, 11 de mayo. El consejo de administración del club italiano Juventus presentó este jueves su renuncia en pleno, mientras que el vicepresidente de la Federación Italiana de Futbol, Innocenzo Mazzini, siguió los pasos del titular de la entidad, y también dimitió a su cargo, al continuar el escándalo en torno a intervenciones telefónicas difundidas en la prensa.
"El consejo de administración de Juventus les devolvió su propio mandato a los accionistas y convocó a una asamblea para el 29 de junio de 2006", expresó la entidad en su documento que distribuyó la tarde del jueves.
El director general del club Luciano Moggi, el administrados delegado Antonio Giraudi y el presidente Franzo Grande Stevens son parte del consejo que dimitió, luego de una multitudinaria y agitada reunión.
Según la prensa italiana, está a punto de estallar una bomba en el calcio, pues de la investigación abierta por la fiscalía de Nápoles, sobre las conversaciones telefónicas interceptadas a Moggi, podría surgir una enorme red de intercambio de favores entre equipos, árbitros y la federación.
Algunas informaciones reve- ladas hoy aseguran que, además de la Juve y de su dirigente, estarían involucrados Lazio, Fiorentina, Udinese, Siena y Messina, así como los equipos de la Serie B, Arezzo, Crotone y Avellino.
La prensa anunció que Gi-raudi está siendo investigado también por las autoridades judiciales de Turín, desde hace varios meses, por falsear datos del balance. Dicha investigación no está relacionada con las que dirigen las autoridades de Nápoles y Roma, en las que Moggi y su hijo Alessandro, que dirige la empresa más importante de agentes de jugadores en Italia, son sospechosos de "asociación con delincuentes destinada al fraude deportivo y a la competencia desleal".
En las conversaciones entre Moggi y el vicepresidente Mazzini, éste último empleó términos injuriosos respecto a Carraro, quien renunció el lunes, y también discutió sobre el delegado del Juventus que asistiría a una reunión acerca de designaciones de árbitros.
Hoy, Mazzini afirmó que sentía "una incomodidad extrema" y la necesidad de renunciar a fin de "eliminar cualquier malentendido".
La federación italiana, en tanto, se comprometió a "tener informada" a la FIFA sobre el caso del árbitro Massimo De Santis, seleccionado para el próximo Mundial, y cuyo nombre se citó en varias ocasiones en el escándalo que sacude al calcio.
Massimo se presentó el miércoles ante la autoridades de Nápoles, después de que varios periódicos anunciaron que estaba siendo investigado por "asociación con delincuentes destinada al fraude deportivo".
Las autoridades, que pretenden determinar si se amañaron ciertos partidos en la temporada 2004-05, no confirmaron si el árbitro había sido inculpado en el caso.