ASTILLERO

Julio Hernández López

Vitrina electoral

Candidatos pasmados

Discursos insuficientes

Atenco, la clave

ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR no ha logrado elaborar una respuesta política e ideológica a la medida de la grave crisis que vive el país. Entrampado en el mundillo de las campañas, haciendo convenencieros cálculos electorales y evadiendo en cuanto le es posible la definición de posturas firmes ("amor y paz" en lugar de protestar con firmeza por la barbarie de Atenco), el puntero desbancado está demostrando aridez intelectual e incapacidad estratégica (tanto así que los únicos atisbos de defensa argumental medianamente elaborados han corrido por cuenta de Manuel Camacho y Porfirio Muñoz Ledo, el primero criticando ¡el oportunismo! de Marcos, y el segundo pretendiendo constituirse en adversario designado de su anterior empleador, el presidente Fox).

FELIPE CALDERON NO ha podido construir apariencias físicas que correspondan a su teórico crecimiento electoral. Asido al discurso del miedo y cada vez más dependiente de El Yunque y la facción del martismo-vicentismo, el michoacano mantiene una campaña desolada, sin propuestas entusiastas ni actitud de verdadero triunfo, como un actor de relevo impensado que al ir leyendo el parlamento de primer nivel siempre tuviera presente su condición secundaria. Las encuestas podrán decir lo que quieran, pero Calderón no mueve ni conmueve, sumido en una mediocridad numérica y discursiva apenas disfrazada de fanfarronerías dizque populacheras y de un zedillista sentido del humor.

ROBERTO MADRAZO NI siquiera es capaz de comulgar tramposamente (luego de recibir la hostia sin haberse confesado, el priísta sufrió una especie de castigo estomacal divino, pues vomitó y se enfermó aunque, según eso, por un analgésico autorrecetado). Dejado de la mano del jefe Salinas (que apuesta al jinete compartido, Felipillo), a Madrazo ya sólo le queda la esperanza de que el choque entre panismo y perredismo sea tan violento que en un escenario de exterminio quede la "experiencia" tricolor como garantía de supervivencia.

LO QUE QUEDA de Vicente Fox vaga por el país y por el mundo repitiendo letanías de cinismo institucional. Sabe que su paso por el poder está marcado por los muertos de Pasta de Conchos, Sicartsa y Atenco pero, en lugar de hacer un alto en esa ruta ensangrentada, se aferra de manera enferma al poder que se le va de las manos y trata de salir al paso mediante tristes muletillas como las usadas ayer en Viena, hablando de respeto a los derechos humanos, de vigencia del estado de derecha (perdón, de derecho) y otras jugarretas macabras parecidas (pero bien acompañado de la señora Que Harta, uno de sus hijos y varios ayudantes cosméticos).

LA NACION, ENTRE TANTO, ve con espanto y sin aparente salvación cómo diariamente la discordia y el choque ganan terreno en el inventario social, alimentados desde distintos flancos (el Internet, un factor fundamental) los odios en busca de votos, exacerbados por un lado quienes desearían exterminar el peligro para México que sería un populista tabasqueño y por otro quienes se niegan a que el país sea gobernado nuevamente por un jinete sin cabeza.

ASTILLAS: A LA HORA de cerrar la presente columna no había noticias de sangre luego de las obstrucciones viales que en distintos puntos de la capital del país se realizaron en protesta por los sucesos de Atenco. Una primera lectura pareciera mostrar que fue poca la capacidad de movilización y de presión de los grupos que participaron en estas acciones. También fue importante la actitud de las fuerzas policiales capitalinas, que no cayeron en provocaciones ni asumieron actitudes de represión por encargo. Las autoridades, tanto federales como del estado de México, sostienen, mientras tanto, una actitud de impúdico aferramiento al discurso legaloide. Fox habló en Viena de una "embestida violenta" ante la cual la fuerza pública debió responder "para traer paz", Eduardo Medina Mora juega al tío Lolo sin aceptar más que por excepción que se pudiera castigar a algún agente criminal, y el gobernadorcillo Peña Nieto trata de inflar el pecho para jugar a que es el hombre de mano dura que la patria necesita... Lectores y amigos han hecho saber al firmante de esta sección astillada que un homónimo está haciendo circular en Internet correos con propaganda contra López Obrador. Habiendo millones de mexicanos con el exótico apellido Hernández, ridículo se vería un Julio pretendiendo exclusividad en el manejo de su heráldica. Sin embargo, quede constancia de que no es el presente tecleador quien hace llegar envíos antipejistas desde la dirección [email protected] (¡chin: con las ganas que tenía este columnero de declararse víctima de complós cibernéticos y de suplantación de personalidad, para luego declararse amenazado por fuerzas oscuras y organizarse desayunos de solidaridad gremial, con discursos vehementes, y toda la cosa! Pero no puede hacerlo porque Todo México es Territorio Hernández)... Emmanuel González-Ortega ([email protected]), mexicano que estudia un doctorado en Barcelona, reporta que hoy habrá allá un acto testimonial de lo que les sucedió en Atenco a dos mujeres españolas, María Sostres y Cristina Valls, quienes sufrieron abusos en México y luego fueron deportadas sin razón jurídica válida... ¡Oh, sí, cuán emocionante se ha puesto la competencia contra sí mismo que Felipe Calderón libra en el buscador de Yahoo México al teclear la palabra "perdedor"! ¡Sólo un día bajó al segundo lugar, pues ayer ya estaba nuevamente en el primero!.. El presidente del IFE derrama melcocha en medio del desastre nacional: que los candidatos son bien buena onda y se han portado al puro centavo, y que los mexicanos debemos confiar en el millón de compatriotas que serán funcionarios de casilla y que garantizarán que no haya fraude electoral... Y, mientras continúan las maniobras que pretenden frenar la distribución del video de Luis Mandoki ¿Quién es el señor López?, ¡feliz fin de semana!

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